Estamos ante el que va a ser uno de los discos del año. Viva Suecia (premio MIN a la Mejor Canción en 2017 y premio MTV a Mejor Artista Español en 2018) han multiplicado por millones sus escuchas en plataformas digitales, entran en lo más alto de las listas de ventas, y siguen comprometidos con dar el máximo nivel en sus composiciones, grabaciones y directos. Charlamos con Rafa Val, vocalista de la banda murciana.

El Milagro os va a catapultar nuevamente a la popularidad y a lo más alto de las listas de ventas. ¿Cuál es el estado de ánimo de la compañía y el grupo?

Se ha creado un clima muy bonito entre todos. Estamos con muchas ganas, medio nerviosos y encantados con todo el asunto. Es bonito vivir este momento.

La canción que da título al disco tiene unas cuerdas que no es la primera vez que ponen en marcha, al estilo de las grandes producciones del brit-pop, con todo lujo y esplendor.

No nos lo pensamos dos veces. La canción pedía a gritos un arreglo de este tipo. Hablamos con el arreglista, con el director, y trajimos una sección de cuerdas de entre doce y catorce músicos que hizo una maravilla que, a día de hoy, todavía nos saltan las lágrimas al escucharla.

Me contaba hace poco que en este disco hay mucho de soul, música negra, pero también noise, brit y todo aquello con lo que flipabais en los noventa. Pero sorprenden los arreglos de cuerda. ¿Cómo deciden incorporarlos?

Sencillamente porque lo vimos muy claro. Somos un poco obsesos, y a veces soñamos o imaginamos cosas que no existen, y nos vienen a la cabeza arreglos con una tímbrica determinada, para un momento determinado de algunas canciones, y la única diferencia es que esta vez hemos tenido el tiempo y los recursos para hacerlo. En el caso de El Milagro, incluso de Días amables, era como una necesidad. No estarían terminadas sin esos arreglos.

No sé si, por ese motivo, el título de El Milagro, que hace alusión a otras cosas, como el milagro que os ha tocado vivir -ser una de las bandas más potentes y queridas del panorama nacional estos últimos años-, también podría ser una forma de inspiración. Lo digo por la portada, que parece tomada de angelotes de Salzillo...

No [Risas], es obra de Yamandú Pazos, que se ha extralimitado -gracias a Dios...- en sus funciones y ha ido mucho más allá de lo que cualquiera de nosotros podría esperar. Ha hecho un trabajazo increíble con el arte..., y lo más visible, claro, es una portada que nos gusta desde el principio: de todas las opciones, esta fue la primera que vimos. Estábamos en México, si mal no recuerdo, y Carlos Galán nos dijo que había encontrado un diseñador y que nos pasaba unas pruebas, y esta fue la primera que vimos. Luego nos enseñó un montón más, pero nos decantamos por esta porque nos parecía increíble. Y luego todo el trabajo que ha hecho con la simbología, con la distribución... Estoy pensando, por ejemplo, en el formato físico del vinilo, que es una cosa bastante especial.

El Milagro es vuestro disco más complejo hasta la fecha. ¿Qué os planteaban? ¿Tenían la oportunidad de hacer todo lo que quisieran y lo hicieron?

Sí, y además no nos hemos puesto límites. Nos hemos permitido dar rienda suelta a todas las cosas que se nos pudiesen pasar por la cabeza; no hemos pensado en ningún momento en qué iba a pensar la gente de lo que hiciésemos o no. Tomamos la determinación firme de poner todo el alma en este disco y de demostrar todo lo que fuésemos capaces de hacer.

No puedo dejar de preguntar por Fóllame, uno de los temas del disco, con un título muy explícito. ¿Cree que tendrá algún tipo de censura en las radios?

Creo, y es una opinión personal, que un título así hace desmerecer a la canción. Da la sensación de que hemos puesto un título muy llamativo para dar un empujón a una canción menor, y ninguno de nosotros piensa que sea una canción menor. Me sonaba un pelín vulgar, y creo -igual me equivoco- que resta un poco de importancia a una canción bastante potente. Es el título definitivo, mal que me pese.

También destacan en el nuevo disco las colaboraciones de Amparo Llanos y Joe Crepúsculo.

Amparo es un encanto y un talentazo. Carlos Hernández [productor de Viva Suecia] produjo el último disco de New Day un poco antes que el nuestro, así que nos comunicamos a través de él. Le gustaba el proyecto, le gustó la canción y cantó. Esa voz nos hacía mucha ilusión... Luego, en la última canción está Joe Crepúsculo, un tipo al que admiramos muchísimo, con el que nos une una amistad bonita, muy natural. Teníamos un trozo en el que cabía perfectamente y lo dejamos para que hiciese su magia.