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'Invasión': un canto al amor en medio de una invasión alienígena

David Martín Porras proyecta Invasión, «una invitación a mirar al otro de igual a igual»

El equipo de «Invasión», ayer en el photocall del Muelle Uno.

El equipo de «Invasión», ayer en el photocall del Muelle Uno. / GREGORIO MARRERO

EFE

Invasión, la nueva película de David Martín Porras, es un canto al amor como única salida a todos los conflictos, incluso si, como cuenta este filme que se estrena en el Festival de Málaga, nos atacan los extraterrestres. «Esta película es una invitación a mirar al otro de igual a igual y confiar en él mostrando nuestras debilidades. No vamos a salir nunca de ningún conflicto por la fuerza y por el odio, aunque es mucho más sencillo soltar una bomba», comentó el realizador.

Invasión cuenta la historia de una irrupción extraterrestre que tiene sometida a la Tierra, donde dos prisioneros (Claudia Salas y Álvaro Rico) de bandos contrarios encerrados en una celda, tres soldados del ejército español refugiados en una fábrica y un matrimonio de científicos (María Adánez y Andrés Gertrudix) a solas con un extraterrestre preso, deben aprender a confiar en el enemigo para poder sobrevivir «a la noche más larga de sus vidas».

La «cáscara» de esta película que se presenta fuera de concurso en el Festival de Málaga es la invasión alienígena, mientras que el «corazón» son sus personajes y las relaciones de amor. Para Martín Porras, hacer esta película ha sido una experiencia muy diferente a lo que ha hecho antes, porque tiene elementos «muy dispares».

Ha subrayado que es un largometraje «muy original», que arriesga «muchísimo» con el lenguaje visual, al combinar la imagen real con la del comic, y que, además, rompe con la narrativa clásica de la mayoría de películas.