El Consejo Superior de Deportes (CSD), la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y la Federación Española de Fútbol (RFEF) alcanzaron ayer avances significativos y hoy volverán a sentarse para concretar la desconvocatoria de la huelga de futbolistas.

Para desbloquear la situación el CSD se ha comprometido a modificar a corto plazo el Real Decreto que regula la distribución de los beneficios de la quiniela, para que "haya mayor posibilidad de financiar los compromisos de la Liga con la AFE", según explicó el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky.

Tras tres horas en la sede del CSD, el presidente del sindicato, Luis Rubiales, no dio por desconvocada la huelga, que sería este fin de semana, y aunque reconoció que se habían producido avances, aseguró que no son suficientes para desconvocala, por lo que emplazó a hoy (20.00).

La LFP recibe el 10 % de la recaudación de la quiniela. Un tercio se destina a inversiones en medidas de seguridad en los estadios, otro tercio al plan de saneamiento que se puso en marcha en 1990 y el otro va a parar a la propia Liga.

Tras el anuncio hecho por AFE el día 5 de la posible huelga, la LFP se declaró incapaz de cumplir el Convenio Colectivo suscrito con el sindicato el 31 de julio de 2008, ante el incumplimiento del acuerdo adoptado ese mismo día con el CSD para buscar iniciativas que evitaran "el uso indeseado o abusivo de la Ley Concursal y elaborar fórmulas de reasignación" de los ingresos de la quiniela.

El secretario de Estado, que dijo "entender la posición de AFE y de los futbolistas que no cobran", insistió en que el problema del fútbol español tiene "carácter estructural" y "tiene que ver sobre todo con el fútbol profesional".

El sindicato reclama el pago de las deudas salariales de 2ª B y 3ª de la temporada 08-09 (4,1millones de euros) y tiene pendiente el cobro de la deuda que la Federación tiene con AFE, cifra superior a 6 millones de euros.