­Arranca el último major de la temporada, el PGA Championship, y con él también el último tren para que Miguel Ángel Jiménez consiga meterse por méritos propios en el equipo europeo de la Ryder Cup y convertirse en el jugador más veterano en participar en el torneo más importante del golf mundial.

El malagueño no quiere oír hablar de resultados y cábalas para lograr su objetivo, aunque sin duda debe terminar muy arriba el PGA, que se disputa en el mítico campo de Valhalla (Kentucky) hasta el próximo domingo.

«Me encuentro fuerte, con ganas y a gusto con lo que estoy haciendo», comentó el churrianero ayer tras disputar su última ronda de práctica antes de comenzar hoy lo importante. Jiménez está muy bien considerado en suelo americano, «The Mechanic», como lo llaman por esos lares, tiene mucho tirón y por ello saldrá los dos primeros días del campeonato en una partida de postín. Y es que, los dos compañeros de juego del «Pisha» no son otros que dos ganadores de «Grandes», el sudafricano Charl Schwartzel y el veterano local Jim Furyck, que pese a la edad sigue dando que hablar, al igual que Jiménez. Los viejos rockeros nunca mueren.

Pero además del aliciente que tiene ver si Jiménez consigue por sus propios medios meterse en el equipo del Viejo Continente y no tener que esperar a las dos elecciones del capitán Paul McInley, el PGA Championship reeditará el duelo del momento en el mundo del golf, que no es otro que el que mantienen Rory McIlroy (número uno) y el español Sergio García (número 3). Ambos jugadores ha copado las primeras posiciones en los dos últimos grandes torneos, el British Open y el WGA Bridgestone, ambos a favor del norirlandés.