Balonmano

El Trops deja escapar una renta de cuatro goles en los últimos instantes

El conjunto dirigido por Quino Soler deja escapar lejos de su cancha una buena oportunidad para doblegar al filial del FC Barcelona (23-21)

Los malagueños encajaron un parcial de seis a cero en la recta final del encuentro. | TROPS MÁLAGA

Los malagueños encajaron un parcial de seis a cero en la recta final del encuentro. | TROPS MÁLAGA / La Opinión. Málaga

La Opinión

El Trops Málaga no pudo comenzar la competición con triunfo, después de que en su visita a Barcelona estuviese a punto de derrotar al filial azulgrana. Tuvo la victoria en sus manos porque disfrutó en los últimos compases de una renta de hasta cuatro goles (17-21).

Con 11 minutos por delante, los locales empezaron a remontar y, con un parcial de seis a cero, ataron los puntos en juego cuando ya casi no contaban con ellos. A a falta de solo cuatro minutos para la conclusión hubo una desconexión absoluta de la defensa y a este factor, como clave determinante, se le sumaron unos continuos errores en ataque.

En relación al recorrido del choque, cierto es que el Trops Málaga tuvo un mal inicio. Y es que dos errores en la faceta ofensiva, con pérdidas de balón, y un lanzamiento desde los siete metros, pusieron el partido cuesta arriba en solo tres minutos (3-0).

El conjunto blaugrana salió a la cancha muy enchufado y jugando a un ritmo eléctrico. Sin embargo, después de este arranque feliz para los intereses del equipo local, llegó la reacción malacitana, que, por fin, se puso el mono de faena y tomó el pulso del partido, y del 3-0 pasó al 4-5 con 12 minutos disputados.

Desde entonces, el encuentro fluyó por la senda de la igualdad. El Barça B consiguió de nuevo adelantarse en el marcador (6-5), pero, enseguida, los malagueños lograban empatar. Así seguían transcurriendo los segundos, con intercambios de goles, hasta que el cuadro catalán abrió otra vez brecha traspasado el ecuador del primer tiempo (8-6), gracias, sobre todo, a las continuas pérdidas en el ataque posicional de los costasoleños.

Y es que el Trops sufría cuando perdía el esférico en campo contrario y la artillería del Barça B corría para sorprender en el contraataque. Menos mal que bajo los palos se encontraba Jorge Oliva, que impidió una renta local aún mayor.

El conjunto amarillo –el Trops vistió su segunda equipación– ajustó entonces la defensa y dio mayor fluidez al ataque, lo que le valió para darle la vuelta al marcador e irse con ventaja de dos (10-12) a falta de minuto y medio para el final. Este rédito lo supo mantener hasta la conclusión del primer acto, al que se llegó con el resultado de 11-13.

Tras la reanudación, los visitantes manejaron bien las diferencias hasta que el malagueño Curro Muñoz puso en el marcador un desafiante 14-18. Tres tantos por cada equipo y así se rebasaba el minuto 19 con el mencionado 17-21 para alegría del medio centenar de aficionados malagueños residentes en Barcelona que se dieron cita en el Joan Gamper. Pero todo empezaba a torcerse justo desde ese momento.