Susto a los autónomos por lo que ha ocurrido con las cuotas de marzo

Los trabajadores autónomos son uno de los colectivos más vulnerables, especialmente cuando se encuentran en los tramos de cotización más bajos: el nuevo sistema de aportaciones de los trabajadores por cuenta propia a la Seguridad Social se enfrenta año a año a modificaciones uqe generan preocupación e incertidumbre en este colectivo.

Desde que entrara en vigor el pasado año el nuevo sistema de cuotas progresivas que propicia que sean los trabajadores que más ganan los que más pagan, también se ha establecido a la obligatoriedad de que todos los trabajadores por cuenta propia hagan la declaración de la Renta.

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En este sentido, 2024 ha marcado un punto de inflexión: un antes y un después para los profesionales autónomos en España. Entre las modificaciones que han entrado en vigor este año y que han despertado la inquietud y el malestar ha estado la de tener que adaptarse a una forma de cotizar más compleja y variable.

Nuevo sistema de cotización para los autónomos

El nuevo sistema de cotización que aprobó el Gobierno en 2022 y que entró en vigor en 2023 fue diseñado para ajustarse a los rendimientos netos mensuales de los trabajadores autónomos y planteaba 15 tramos de ingresos que determinan el monto de las cuotas a pagar en la Seguridad Social.

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Una de las pegas que le ponen a este modelo es que no solo introduce la variabilidad anual en las cotizaciones: es decir, cuánto se ha ganado en un año con respecto al anterior, sino que también implica una mayor complejidad a la hora de gestionar las finanzas y los tributos de los trabajadores autónomos.

La necesidad de revisar cada dos meses los ingresos para ajustar las cotizaciones al tramo correspondiente suman una dificultad más a toda la tarea burocrática que deben afrontar estos trabajadores.

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Calcular los rendimientos netos de cada mes es lo que determina la base de cotización y, por ende, qué cuota van a pagar en el rango entre 225 y 530 euros. Este proceso, que en principio busca ser más justo con la forma de aportar de los trabajadores autónomos a la Seguridad Social, ha terminando añadiendo una capa de complejidad administrativa y contable a su trabajo.

Más allá de los cambios en el sistema de cotización, el año 2024 ha llegado con una importante modificación: y es que a partir de ahora, los trabajadores autónomos están obligados a presentar la Declaración de la Renta. Desde ahora, todas las personas hayan estado dadas de alta en el Régimen de Autónomos de la Seguridad Social durante el 2023 tendrán que cumplir presentar su Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.

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El objetivo de esta medida es, además de regularizar las cotizaciones ajustando las cuotas cuando haya discrepancia entre las previsiones y los rendimientos definitivos, también implica un cambio importante en los requisitos fiscales para estos trabajadores, que hasta ahora no estaban obligados a presentar la Declaración si no llegaban al mínimo de ingresos exigible.

Por tanto, el próximo día 3 de abril todos los autónomos tendrán que presentar la declaración de la Renta, independientemente de los ingresos que hayan tenido en 2023.