Un trabajo sobre "Remodelación fronto-orbitaria en edad pediátrica", presentado por profesionales del Hospital Regional de Málaga, ha recibido el premio a la mejor comunicación otorgado por la Sociedad Andaluza de Neurocirugía (SAN).

En la publicación se exponen las diferentes técnicas que desarrollan los profesionales de este centro para el tratamiento quirúrgico de las malformaciones fronto-orbitarias en niños, ya que estas patologías afectan tanto a la estructura facial como al cráneo, ha informado hoy el Hospital Regional en un comunicado.

Las intervenciones quirúrgicas por malformaciones cráneo-faciales corrigen problemas asociados a estas patologías, como daño ocular, dificultad para respirar y problemas en la masticación, así como importantes secuelas psicológicas desde el punto de vista estético.

El tratamiento quirúrgico en edad temprana, en los primeros meses o años de vida, según cada caso, ofrece mejores resultados clínicos y previene complejos del niño por su aspecto físico.

Sin embargo, cada caso requiere una atención individualizada por parte de los especialistas para determinar el momento más adecuado y el tipo de intervención.

Entre las malformaciones cráneo-faciales más frecuentes que se operan en el Hospital Materno Infantil de Málaga destacan las cráneo-sinostosis o cierre precoz de las suturas del cráneo, que impide el desarrollo normal de la estructura craneal, de las cuales se realizan unas veinte al año.

La cráneo-sinostosis provoca una deformación en la frente y cara del niño y su tratamiento quirúrgico está indicado tanto por la compresión e hipertensión craneal que produce como por la posible atrofia del nervio óptico y el retraso del desarrollo psicomotor, además de corregir estéticamente la zona deformada.

Entre las patologías que producen malformación cráneo-facial también destacan los encefaloceles, una enfermedad rara de origen genético que se caracteriza por una salida de masa cerebral sobrante del encéfalo que ha de ser extirpada.

Esta intervención, que no deja secuelas neurológicas, se realiza a través del cráneo o del rostro y conlleva la reconstrucción de la parte de la cubierta del encéfalo que no ha cerrado correctamente.

Por lo que a técnicas quirúrgicas se refiere, en el Hospital Materno Infantil se llevan a cabo desde hace dos años cráneo-plastias en niños o reparaciones de la deformidad craneal utilizando hueso del mismo paciente, con lo que se evita el empleo de material sintético, al mismo tiempo que se previenen infecciones.

Para la corrección de la estructura cráneo-facial, en los casos en que se precisa un alargamiento de huesos, se emplean también técnicas de distracción osteogénica que favorecen la prolongación ósea de forma gradual.

En determinadas intervenciones quirúrgicas, los profesionales emplean técnicas endoscópicas para la corrección de defectos congénitos, lo que supone un menor riesgo quirúrgico, menos días de ingreso y una menor pérdida de sangre en comparación con la cirugía abierta.