Nuevo tira y afloja entre el sindicato de enfermería Satse y el Complejo Hospitalario Carlos Haya, en este caso, con el Materno Infantil. Dos neonatos fueron aislados hace un mes a causa de una infección nosocomial y un tercero fue internado en cuidados intermedios como medida preventiva por haber colonizado el germen. De este modo, el centro hospitalario desmiente las afirmaciones del sindicato, que había denunciado que la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Unidad de Neonatología del Hospital Materno Infantil se ha quedado pequeña y que los recién nacidos están hacinados.

«No tiene el más mínimo fundamento científico», subrayó ayer el especialista en medicina preventiva Salvador Oña. Explicó que los dos bebés que se encontraban ingresados en aislamiento ya han superado la infección por el estafilococo áureo, y que el tercero continúa en cuidados intermedios con el simple tratamiento de una pomada. Además, asegura que las incubadoras son pequeños habitáculos cerrados que aíslan por completo a unos pacientes de otros, por lo que afirma que están «protegidos». «La ocupación está entre el 55 y el 70%». También explica que el 7% de los ingresados en los hospitales tienen estas infecciones.

El responsable de Satse en el centro sanitario, Alfonso Calvo, asegura que uno de los motivos por los que los pequeños han podido resultar infectados es que la Unidad de Neonatología no sigue los estándares y recomendaciones de la Sociedad Española de Neonatología. Critica que desde hace algo más de un mes el Materno permite que los visitantes de los niños en cuidados básicos e intermedios no utilicen batas o patucos para entrar. «Una abuela que entra cinco minutos a ver su nieto ya no tiene la obligación de cubrirse, por lo que ese también es un foco de bacterias», apunta, mientras recuerda que estos gérmenes se transmiten por contacto.

Además, el doctor Oña explica que esta bacteria, que descama la piel, es muy habitual ya que se encuentra en lugares cotidianos y limpios. «Los neonatos son niños muy complejos, tienen poca inmunidad. Lo que para nosotros es una simple molestia para ellos es más importante, de ahí que los aisláramos». Satse también alerta de que desde que en 2010 el hospital pusiera en marcha la Unidad de Puertas Abiertas –acceder con libertad las 24 horas del día– puede ser un motivo de contagio, aunque reconoce los beneficios que esta medida supone tanto al neonato como a sus padres. Por este motivo, el doctor Oña critica al sindicato. «Desde el punto de vista epidemiológico no ha supuesto ningún problema para los niños». Por su parte, la defensora del Paciente, Carmen Flores, señaló ayer que no se trata de un caso aislado y ha escrito a la Fiscalía para pedir que se investigue.

Por otro lado, Salud notificó ayer que el único paciente adulto que quedaba en Carlos Haya afectado por la bacteria klebsiella neumoniae ya no se encuentra infectado, mientras que los últimos cuatro que también lo estaban ya están en planta. Cabe recordar que a finales de abril se detectaron un total de 19 casos de estos gérmenes en la UCI.

Salud también recordó que las infecciones nosocomiales por gérmenes oportunistas –como la klebsiella, serratia, estafilococos– existen en todos los hospitales como consecuencia de la frecuencia en la utilización de antibióticos.