Uno de los problemas que se puede encontrar el metro de Málaga es la incertidumbre política que habrá durante este primer semestre del año. Las elecciones locales de mayor introducen un elemento que puede distorsionar las negociaciones entre el Ayuntamiento y la Consejería de Fomento y la obtención de los permisos de obra. Se juega mucho el alcalde en estas elecciones y es probable que no quiera dar pasos en falso con el metro. Ya ocurrió en anteriores elecciones.

Además, el pacto entre el PSOE e IU en el Gobierno andaluz sigue sin encontrar la estabilidad requerida. Hay voces de uno y otro partido que apoyan la ruptura, lo que afectaría a la Consejería de Fomento, ahora mismo en manos de IU.