Recuperar el equilibrio de la capital malagueña frente a la saturación del tráfico es el propósito principal de un innovador proyecto de colaboración entre las Escuelas de Arquitectura de Málaga y Sevilla. «Una ciudad amable, armónica y mejor organizada. Más peatonal y accesible. Que incite a la reunión ciudadana y apoye, con un plan de movilidad, la unión de los museos», defendió ayer, durante la sesión inaugural, uno de sus impulsores, el arquitecto y profesor Antonio Barrionuevo.

Bajo el título Proyecto Málaga Litoral, los alumnos de ambas universidades trabajarán mano a mano, durante tres intensos meses, en la búsqueda de propuestas reales con las que mejorar el conocido como «frente litoral histórico». Para ello, los futuros arquitectos se centrarán en el estudio del eje entre el Paseo del Parque, la plaza de la Marina y la Alameda Principal hasta la desembocadura del río Guadalmedina, así como en una investigación previa de la evolución experimentada por la urbe en los últimos años.

En definitiva, se trata de encontrar los medios que permitan llevar a cabo parte de las propuestas elaboradas por los universitarios implicados. La fecha límite, el próximo 10 de junio, cuando dicho proyecto llegue a su culmen con la exposición final de los distintos trabajos. La jornada inicial comenzó con la presentación del proyecto de colaboración por parte de Carlos Rosa, director de la Escuela de Arquitectura de Málaga, y Antonio Barrionuevo, profesor titular del departamento de Proyectos Arquitectónicos de la Universidad de Sevilla. Las intervenciones de la historiadora del arte Rosario Camacho o del ingeniero de caminos canales y puertos Indalecio de la Lastra fueron otras de las ponencias programadas en el día de ayer.

La apuesta de Barrionuevo pasa por «una reconfiguración del espacio» que incluye, por ejemplo, una modificación en la plaza de la Marina, a su juicio, «no muy afortunada» o en el túnel de la Alcazaba, «que aunque fue una buena opción para descongestionar la zona, podría mejorarse». Además de recuperar escenarios públicos, como la Alameda Principal, «que en la actualidad solo puede ser disfrutada en ocasiones muy puntuales como Semana Santa».

Como sevillano de padres malagueños, Barrionuevo ha realizado varios proyectos sobre la ciudad durante sus 43 años como profesor. Sin embargo, reconoce que es la primera vez que consigue hacerlo conjuntamente con la UMA, implicando a los alumnos en un trabajo que tiene como objetivo principal generar propuestas viables aprovechando la aparición de nuevas oportunidades para la movilidad urbana como la implantación del metro.