Los malagueños señalan el déficit industrial como la característica más desfavorable de la economía provincial, por lo que es el único sector productivo que suspende en el Barómetro Provincial 2018 de la Fundación Madeca de la Diputación, con el turismo, el comercio y la agricultura como principales fortalezas.

Así, el desarrollo de la industria turística recibe una nota de 7,53 puntos sobre 10; el de comercio y servicios, un 6,72; agricultura, un 5,87; mientras que pesca y ganadería, con un 5,59, y el de tecnología, con un 5,1, cierran la lista de los aprobados. La citada industria alcanza únicamente un 4,49, según señaló el diputado de Desarrollo Económico y Productivo y responsable de Madeca, Jacobo Florido.

Esta conclusión de la tercera entrega del estudio estadístico de 2018 es coherente con los últimos datos facilitados por Analistas Económicos de Andalucía (AEA), fechados el pasado julio, que señalan que el empleo industrial es el único que ha decrecido en la provincia en el primer trimestre del año (-6,5%). La última Encuesta de Población Activa (EPA) también confirma este extremo.

En una valoración repartida entre las diferentes comarcas malagueñas, el sector industrial recibe la nota más baja en todas ellas y sólo aprueba en Antequera (5,08) y Guadalteba (5,03). El tecnológico es el otro que peores registros presenta, con suspensos en Axarquía, Ronda, Sierra de las Nieves y Guadalhorce; y en las demás, aunque aprueba, no sobrepasa el 5,37 cosechado en Antequera.

El diputado añadió que, sin embargo, «no es el sector industrial el que más inversiones necesitaría a juicio de los encuestados, sino que es el segundo (16,7%) de los malagueños», por detrás de la agricultura (23 por ciento del total). El tecnológico es el tercero (15,3%). Turismo y pesca y ganadería cierran las preferencias.

Por tramos de edad, destaca el hecho de que los más jóvenes (entre 18 y 29 años) consideran que debe ser el turismo -el sector líder provincial que supone el 20 por ciento del empleo provincial con casi 130.000 ocupados- el que más inversiones reciba para su desarrollo por parte de las administraciones. En segundo lugar sitúan a la agricultura, que ha experimentado un importante crecimiento en los últimos años debido sobre todo al empuje de las exportaciones; y, como tercero, al tecnológico.

Los demás grupos de edad (30-44, 45-64 y más de 65 años) coinciden en que el sector más beneficiado por las instituciones públicas debe ser la agricultura, seguido de la industria; y sitúan al turismo como tercera opción.

«Los malagueños son conscientes de que el turismo es el sector básico, pero también apuestan por el agroalimentario, la industria y la tecnología», destacó Florido de las principales conclusiones de esta tercera y última entrega del barómetro de 2018.

Por otra parte, el estudio demoscópico recoge una mejora de la percepción de la Diputación como institución principalmente dedicada al fomento de las infraestructuras y el apoyo a los municipios, dijo el diputado.

Así, los encuestados destacan el papel de la institución provincial como impulsora de las infraestructuras (30,6%) y de apoyo general a los municipios (28,8%), además del desarrollo y la productividad (16,5%) y los servicios sociales e igualdad (6%). Proyectos como el Caminito del Rey, la Senda Litoral, la mejora de las carreteras, Sabor a Málaga o el centro de innovación social La Noria han influido en esta realidad, subrayó Florido.