El sindicato policial Justicia Policial (Jupol) de Málaga solicita al Gobierno español más recursos para garantizar la seguridad y un buen trabajo de los agentes que reciben a los inmigrantes rescatados en alta mar. Según fuentes de esta organización, una de la prioridades de la capital es la construcción de un Centro de Atención Temporal a Extranjeros (CATE), un elemento que permitiría aprovechar mucho mejor los recursos existentes. Desde Jupol, que ya representa a un tercio de la plantilla de la Policía Nacional en la provincia de Málaga, explican que la situación se agrava porque cada vez se recibe a más personas y los medios técnicos y humanos son los mismos que antes de que la crisis migratoria se intensificara.

El problema, añaden desde el sindicato, ya no es sólo la calidad en la atención humanitaria que hay que ofrecer a las personas rescatadas nada más llegar a puerto, sino que cada vez que la Policía Nacional se moviliza ante la llegada de un gran número de inmigrantes la seguridad de la propia ciudad se ve mermada.

En este sentido, explican que si la llegada se produce de noche (la mayoría de las veces) y en las calles de Málaga suele haber entre siete y ocho coches patrullas, al menos la mitad de esos vehículos y sus agentes tienen que abandonar las tareas de seguridad ciudadana para dedicarse a los trámites que exige el protocolo de inmigración. Esto incluye garantizar la seguridad en la zona de llegada de los inmigrantes, su custodia, acompañarlos en los traslados o la vigilancia de los espacios en los que son habilitados mientras duran todos los trámites policiales. «No es lógico que el Gobierno no tome medidas extraordinarias para una situación tan delicada. La plantilla de Málaga es deficitaria desde hace años y sabemos que los responsables de la Comisaría Provincial trabajan con lo que tienen, por lo que son los responsables del Gobierno o el Ministerio del Interior quienes tienen que tomar medidas», concluyen.