La plataforma de afectados por el nuevo recorrido oficial de la Semana Santa malagueña manifestó ayer mediante una rueda de prensa su descontento frente a los cambios y gestiones que está llevando a cabo la Agrupación de Cofradías de Málaga, pidiendo entre otras cosas que "se vuelva al trazado anterior".

Reclaman que no se les haya informado con tiempo de todos los trabajos y propuestas que se estaban llevando a cabo. "Entendemos que se trata de una profunda transformación que debía haber contado con toda la ciudad como protagonista y no solo con el criterio de 40 hermanos mayores, por muy legitimados que estén por sus correspondientes cabildos", ha destacado Carmen Rosado, una de las responsables de la plataforma.

La seguridad de la nueva localización de las sillas dentro del recorrido es una de las preocupaciones principales de este movimiento, quienes entre otros problemas hacen hincapié en la disposición del nuevo recorrido oficial en forma de 'U' irregular, considerándolo inseguro por su propia naturaleza sinuosa, generándose especialmente dos zonas de público abonado que están rodeados por todas o casi todas sus partes de posible evacuación.

A este hecho, suman la incorporación de nuevas calles al trazado que antes se usaban como vías de evacuación. "Condenamos varias calles céntricas amplias y que nunca han estado usadas en demasía por procesiones como son el eje Especería-Cisneros, Martínez, Molina Larios y Postigo de los Abades. Estas vías de evacuación quedan canceladas por ser zona oficial o de influencia, más aún con la colocación de obstáculos fijos como la rampa que bloqueará la zona sur de la Catedral".

En el encuentro que ha tenido lugar con la prensa desde la plataforma llaman a que se "recapacite y se reconsidere las posiciones para que no tengamos que lamentar nada".

Los representantes, ya reunidos previamente con el presidente de la Agrupación y el Alcalde de Málaga, manifiestan que buscaban un gesto por parte de ellos para realizar una labor didáctica y explicar lo defendido, pero frente a su negada respuesta no descartan dar el paso de entablar una vía judicial. "El tiempo de los gestos se acabó desde el momento que la Agrupación ha empezado a cobrar sillas, cuando todavía no sabemos dónde estarán ubicadas y faltando a su palabra el presidente de la Agrupación, quien nos aseguró que se haría lo contrario: primero avisamos y luego cobramos.", afirma Cobos.