El éxito personal, como en los partidos que pueden acabar en infarto, también llega en el tiempo de descuento. En un tramo poco determinante ya en este mandato de la Diputación, el pleno ordinario correspondiente al mes de abril comenzó con la llegada de dos nuevos diputados. A un mes de las elecciones municipales, todo lo que podría haber aportado en caso de incorporarse antes, se convierte en un mero ejercicio de ficción. Pero los huecos hay que rellenaros y así tomaron posesión por el PP, Manuel Cardeña, y como no adscrito, cubriendo el hueco que dejó Gonzalo Sichar, Antonio Pérez. Cardeña es un conocido que ya ocupó un escaño en el anterior mandato, y que ahora viene a rematar lo que queda en favor de su partido, ganándole la rifa a otros compañeros de filas, pues bien es sabido que un puesto de diputado en la corporación provincial siempre cotiza alto entre el político local. Pérez, al contrario, es un desconocido en la política provincial y lo más que se le recuerda fue por su expulsión de Ciudadanos, partido por el que obtuvo el acta de diputado en 2015, cuando iba en las listas naranjas al Rincón de la Victoria. El mal ambiente genera, a veces, unos espacios entre las personas que ayer se manifestaron claramente entre la portavoz de Ciudadanos, Teresa Pardo, y el propio Pérez. En vez de ocupar los asientos contiguos, pusieron tierra de por medio. También, al propio Cardeña, para hacer aún más creíble el mal rollo entre ambos. No se le vio muy activo a Pérez, que se dedicó a abstenerse, prácticamente, en todas las votaciones.

El propio pleno en sí fue la demostración de que la política se mueve ya en un claro ambiente de contaminación electoral o preelectoral, haciendo aflorar rencillas entre las diferentes formaciones, culpándose los unos a los otros de querer aprovechar las instituciones de manera partidista. Tanto la portavoz del PSOE, Antonia García, así como su homóloga de IU, Teresa Sánchez, mantuvieron los enfrentamientos más sonados con el presidente de la Diputación, Francisco Salado, y la vicepresidenta de la Diputación, Francisca Caracuel. El PSOE cuestionó la elección de Rincón de la Victoria como municipio para acoger la celebración de los actos correspondientes al Día de la Provincia. Según García, se trata de una elección con un claro trasfondo electoralista, al entender que Salado quiere sacar un rédito electoral para su propia carrera por revalidar el Ayuntamiento del Rincón. Salado es, en estos momentos, alcalde del municipio de la Axarquía.

Otro punto del orden del día que elevó la tensión fue la aprobación de una modificación presupuestaria que llevaba a pleno el equipo de gobierno del PP. Los populares lograron sacar adelante una modificación para destinar una parte asignada al Patronato de Recaudación a la propia institución provincial. En concreto, se trata de una modificación de crédito que desembocará en una inversión de 16 millones para los diferentes municipios. Esta modificación, a pesar de todo, ha enfrentado al equipo de gobierno del PP con los partidos de la bancada de la izquierda, con el PSOE e IU acusando al presidente de la Diputación, Francisco Salado, de querer privatizar el Patronato de Recaudación. Unas acusaciones que fueron rebatidas por el propio Salado, remitiéndose a que se trata de «acusaciones falsas e infundadas».

Del total de las cantidades aprobadas este martes, diez millones proceden del remanente del Patronato de Recaudación Provincial (PRP), algo muy criticado por PSOE e IU, quienes han acusado al equipo de gobierno del PP de «descapitalizar» a este organismo, algo rechazado por los populares, quienes defienden que el superávit de este patronato asciende a 16 millones. Sánchez, de IU, apuntó que esta modificación de crédito «arroja una necesidad de financiación de 2,5 millones de euros; usted lo llama como quiera pero saca más dinero de lo que entra en el Patronato», criticando que en su día el que fue presidente del organismo, ahora máximo dirigente de la Diputación, quiso privatizarlo.

En total, 31 municipios de la provincia han sido preseleccionados para esta convocatoria en la que se primará la longitud de los caminos, el número de explotaciones por los que pasan y el uso de los mismos, y en breve se publicará la resolución con las actuaciones definitivas.

El próximo pleno ordinario perteneciente al mes de mayo se celebrará ya a las puertas de unas elecciones locales que pondrán en juego la Diputación. Las locales del 26 de mayo decidirán si el PP puede mantener la institución o si habrá vuelco.