En plena tempestad, bajo la tormenta que ha descargado a la altura del Paseo del Parque la subida salarial recién aprobada, el Ayuntamiento de Málaga ha hecho pública en su web las declaraciones de bienes de los concejales que estos días estrenan legislatura y sueldo. Entre esta lluvia de números que abriga en varios casos cierta antología de las economías desahogadas, destaca el hecho de que el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, haya descendido desde el liderato hasta la tercera plaza, en cuanto a lo que la posesión de un activo patrimonial se refiere. Aunque en 2015 hizo públicas posesiones por valor de unos 742.500 euros, en las cifras que ha presentado el regidor en el ejercicio que ahora comienza solo se aprecian 483.837 euros a los que no hay que restarle nada de deuda. Esta bajada explica que haya sido adelantado en tal pujanza por otros dos ediles de su grupo, Susana Carillo y Raúl López.

Curiosamente, De la Torre ha sido relevado en la primera posición de una hipotética clasificación de los bienes declarados por la ingeniera industrial independiente que fichó para secundarle, Susana Carillo. La número dos de la lista del PP es la poseedora de un patrimonio de 752.295 euros, de los que adeuda otros 129.650. Esto hace, precisamente, que el segundo en esta tabla de 'acomodados' -el edil de Urbanismo, Raúl López- sea quien presenta un mayor balance positivo. Si se siguen los datos del portal municipal, López ha acumulado un activo de 671.713 euros a los que solo le resta un pasivo de 19.851.

Aunque sean tres miembros del Partido Popular los que copen el podio de quienes muestran una mejor situación económica, detrás de ellos no tardan en aparecer integrantes de otras fuerzas políticas. Por ejemplo, la edil recién estrenada como portavoz de Ciudadanos con pasado en UPYD, Noelia Losada, cuenta con bienes que ascienden a 338.341 euros y la cantidad que adeuda solo es de 38.247.

Asimismo, en el PSOE, es la concejal María del Carmen Martín quien se destaca notablemente respecto a sus compañeros de bancada, ya que acumula bienes por valor de 257.563 euros frente a los 22.569 a los que asciende su pasivo. En cambio, su compañero y líder de la oposición, Daniel Pérez, se atribuye guarismos mucho más ajustados en los que los bienes son de 134.507 euros y las deudas de 106.218.

No obstante, mucho mejor balance que Pérez ha asumido el otro portavoz de una formación de izquierdas en la Casona del Parque, Eduardo Zorrilla. El candidato de Adelante Málaga posee bienes que suman 213.092 euros y solo tiene en negativo 13.155 euros. Igualmente positivos son los indicadores de otra edil de la confluencia de Podemos e Izquierda Unida, Francisca Macías, que tiene un patrimonio de 82.864 euros y su pasivo brilla por inexistente.

A la cola de esta declararación de bienes y a 'euros luz' de sus restantes compañeros en el Consistorio, se encuentran dos de los ediles más jóvenes que, además, vienen a ser dos de los debutantes en la recién estrenada corporación municipal. Se trata del representante de Adelante Málaga con una amplia estela de activista político, Nicolás Sguiglia, quien solo declara 4.000 euros, y del concejal y responsable de la agrupación socialista de Campanillas, Rubén Viruel, que ha hecho público una cifra que suma justo el doble, 8.000 euros. Además de esta austeridad en las posesiones declaradas, ambos tienen en común que no han mostrado ni un solo euro de pasivo.En números rojos

De los 31 ediles que componen la corporación municipal, solo cinco de ellos presentan un saldo negativo en el balance económico que han declarado. Adelante Málaga es el único grupo político que no cuenta con un concejal en números rojos entre sus integrantes, mientras que en el Partido Popular llegan a ser tres los representantes endeudados.

De ellos, Gemma del Corral revalida el liderazgo en este ranking negativo, con un resultado aproximado de -80.000 euros que, paradójicamente, arroja una situación de alivio tras la reducción en unos 160.000 euros de la cantidad que adeuda. De hecho, durante la legislatura pasada, Del Corral llegó a hacer públicas deudas que superaban los 400.000 euros, mientras que en la actualidad rondan los 263.000.

Tanto las cifras de Francisco Javier Pomares -con bienes de unos 133.000 euros y un pasivo de 178.153- como Jacobo Florido -con un activo de 236.950 euros y préstamos de 265.000- tampoco se abonan al desahogo. En la misma senda, el PSOE cuenta con Pablo Orellana en guarismos que le restan casi 71.000 euros de pasivo a un activo de solo 30.406; mientras que en Ciudadanos el exportavoz Juan Cassá declara bienes por casi 112.000 euros y deudas de 126.411, lo que contrasta con la bonanza que proyecta la declaración de su sucesora y única compañera de grupo municipal, Noelia Losada.