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Ayudas

Los socialistas reprochan al Ayuntamiento otorgar "a dedo" 11 millones en subvenciones

El PSOE afirma que la Cámara de Cuentas ha censurado esta práctica y exigen al alcalde De la Torre "pulcritud y transparencia" en las ayudas

El portavoz del grupo municipal socialista, Daniel Pérez, informó ayer de que el Tribunal de Cuentas «ha censurado al Ayuntamiento de Málaga por otorgar a dedo 11 millones en subvenciones» y exigió al equipo de gobierno «que sean transparentes y justos a la hora de conceder ayudas». Según Pérez, el alcalde, Francisco de la Torre, «está convirtiendo lo excepcional en lo cotidiano, porque estas excepciones no son actividades de interés, sino personas físicas o jurídicas concretas que se repiten sin justificación oportuna».

En compañía de la concejala Alicia Murillo, el portavoz socialista pidió al regidor «pulcritud y transparencia» en la concesión de ayudas a las organizaciones no gubernamentales, «porque si bien necesitan realizar su actividad con garantías y estabilidad económica, los políticos también debemos dar ejemplo en el reparto justo y bajo control del dinero público».

«Dar dinero de manera discrecional debería ser una excepción, algo que por urgencia se concede, ya que de lo contrario genera desigualdad entre organizaciones. El problemas es que el PP ha convertido esta discrecionalidad en la marca de la casa, en su modus operandi», lamentó el portavoz socialista, que volvió a pedir «transparencia» al alcalde.

El edil socialista recordó que el procedimiento ordinario de concesión de subvenciones debe tramitarse en régimen de concurrencia competitiva, «porque es lo habitual y también la forma más saludable en democracia». Añadió que tras la aprobación del presupuesto 2020 es «obligatorio» realizar un Plan Estratégico de Subvenciones, «imprescindible» para que el Ayuntamiento pueda comenzar a otorgar las ayudas.

«La excepcionalidad o urgencia no siempre están justificadas ya que muchas de las subvenciones nominativas o excepcionales son gastos previsibles y repetitivos año tras año», manifestó Pérez. « De aquí a la arbitrariedad hay una delgada línea roja que el Ayuntamiento no debería cruzar nunca», añadió Pérez.

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