«Tres personas han estado a punto de perder la vida, ¿están esperando a que pase una desgracia?», comenta Pedro Moreno. El presidente de la Asociación de Vecinos de La Isla de Campanillas recuerda el caso de un hombre mayor, además de el de un padre y su hija, que años atrás estuvieron a punto de ser arrastrados por la corriente del río Campanillas.
Pedro Moreno representa a los vecinos de La Isla, una quincena de familias situadas en diez hectáreas de terreno entre dos brazos del río Campanillas, a la altura de La Fresneda. «Estamos en medio, somos una isla», recalca, al tiempo que recuerda que cuentan con una calle en el callejero municipal: el Camino de La Islilla.
«Los vecinos pagamos de 300 a 700 euros de IBI, como si estuviéramos en el Cerrado de Calderón, pero no recibimos ningún servicio», lamenta.
Como explica Francisco Navarro, el vecino más antiguo, La Isla comenzó a levantarse en 1986, cuenta con electricidad y pozo propio, pero cuando llueve y el río Campanillas baja con mucha agua, los vecinos se quedan incomunicados.
«Pero no sólo los vecinos, aquí hay una finca muy grande con limones y si los jornaleros acuden y les pilla el río crecido, también se quedan sin poder salir, y lo mismo de los viveros, porque la servidumbre de este carril llega a todos ellos y es un paso continuo de camiones», comenta Francisco Navarro.
Además, este vecino precisa que no hace falta que caiga una tromba porque, «el problema es que un día de sol abren la presa de Casasola y te han pillado aquí», resalta.
Los vecinos lamentan que cuando hablan con el Ayuntamiento de Málaga, responda que la zona es inundable y no es urbanizable. Pese a que se han demolido dos viviendas, el presidente vecinal Pedro Moreno destaca que hay vecinos de La Isla que ya han conseguido regularizar su vivienda.
Con respecto a la inundabilidad de la zona, Francisco Navarro destaca que «nunca se ha inundado», desde que vive en La Isla hace 34 años. De hecho, resalta que el que el cauce del río se divida en dos al llegar a La Isla es su mayor garantía de que no se inundará.
Los vecinos piden al Ayuntamiento un puente para vehículos que salve los 22 metros del primer brazo del río pero si no fuera posible, proponen la pasarela peatonal de Santa Rosalía Maqueda. «No la utiliza nadie», resalta la presidenta vecinal de Campanillas Carmela Fernández.
Respuesta del Ayuntamiento
La concejala de Campanillas, Ruth Sarabia, contestó que en teoría, la zona de La Isla «es para casas de aperos» y una vez al mes se comunica la apertura de la presa de Casasola, que de forma excepcional ha desaguado más días tras las fuertes lluvias. La cuestión de la pasarela, destacó, compete a la Junta, a la que ha consultado y le informa de que por ahora en La Isla no aparece ninguna vivienda regularizada.
