Un estudio realizado por oncólogos del Grupo de Trabajo de Inmunoterapia de la Sociedad Andaluza de Oncología (SAOM), pertenecientes a once hospitales de la comunidad, ha concluido que el empleo de los inhibidores de los puntos de control inmune (ICI) supone una mejora terapéutica para muchos pacientes con cáncer, tras confirmar que los resultados obtenidos en pacientes de ensayos clínicos son similares a los alcanzados en pacientes reales tratados en la consulta de oncología de estos centros hospitalarios de la comunidad.

Según un comunicado, esta investigación presenta los primeros resultados del nuevo registro Ripacina que el Grupo de Inmunoterapia de la SAOM está desarrollando y que está permitiendo caracterizar con exactitud a los pacientes tratados con este tratamiento en Andalucía.

En el estudio han participado oncólogos de los hospitales Virgen del Rocío y Macarena de Sevilla, el Complejo Hospitalario de Jaén, el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, los hospitales Virgen de la Victoria, Costa del Sol y Regional Universitario de Málaga, los hospitales San Cecilio y Virgen de las Nieves de Granada, el Hospital Reina Sofía de Córdoba, y el Hospital Puerta del Mar de Cádiz.