Expo 2027

Málaga se prepara para una semana crucial en la carrera por hacerse con la Expo 2027

La Comisión de Evaluación del Bureau International des Expositions visitará primero Madrid, donde tendrá una audiencia con el Rey, el presidente del Gobierno e irá al Congreso de los Diputados - En Málaga, los expertos se reunirán con el Consejo Social de la ciudad, los grupos políticos y el empresariado

Infografía del recinto de la Expo en Málaga.

Infografía del recinto de la Expo en Málaga. / L. O.

Ana I. Montañez

Ana I. Montañez

Málaga afronta la próxima semana unos días cruciales para afianzar la candidatura de la ciudad como sede de la Expo 2027.

Desde el lunes hasta el viernes, un equipo del Bureau International des Expositions (BIE), el organismo responsable de la elección de la ciudad ganadora, viajará a España para analizar la propuesta de país para acoger la exposición especializada que se celebrará en 2027, como ya ha ocurrido en Phuket (Tailandia), Belgrado (Serbia) y San Carlos de Bariloche (Argentina).

Después de su paso por España, el BIE viajará para hacer lo propio en Minnesota, en Estados Unidos.

Así, la comisión de evaluación del BIE estudiará al detalle la viabilidad de la propuesta de Málaga, con el tema «La Era Urbana: hacia la ciudad sostenible», que entró oficialmente en la carrera por la Expo el pasado 26 de enero.

La primera parte de esta visita será en Madrid. Allí los miembros del Bureau International des Expositions se reunirán con el rey Felipe VI, con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, con los portavoces de todas las formaciones políticas, empresarios y sindicatos más relevantes.

Una vez en Málaga, estos expertos mantendrán una reunión con el Consejo Social de la ciudad, también con todos los grupos políticos y tendrán una comida con el tejido empresarial.

«Aquí hacemos un modelo que es lo que nos piden ellos, un examen muy técnico con cuatro sesiones de trabajo de cuatro horas o cinco, donde ellos eligen 14 temas a desarrollar, desde cómo va a ser el recinto, visitantes, aspectos concretos como cuánto va a costar», explicó ayer durante una ponencia en el congreso de Greencities y S-Moving el director general para la Expo 2027, Jerónimo Blasco, quien estuvo al frente del equipo que coordinó la candidatura de Zaragoza con el que se consiguió organizar la Expo del Agua en 2008.

Continuidad y viabilidad

«Nos interesa mucho que vean que no es un proyecto que se corresponde solamente a un color político sino que tiene asegurada su continuidad aunque haya cambios políticos en el camino», dijo. Asegurar esa continuidad es vital para los miembros del BIE, que arrastran malas experiencias del pasado en las que no se llegaron a celebrar estos eventos internacionales precisamente por un cambio de siglas políticas.

«En Francia, hace unos años, Saint Denis ganó la Expo, hubo un cambio político nacional y dijeron que no se hacía. Ya no daba tiempo a que lo hiciera otra», evocó Blasco, durante su ponencia, a la que también asistió el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. «Tienen mucho interés en que sean viables, que sean capaces de organizarlas y de invertir».

Otro ejemplo es Argentina, que en 2020 comunicó que no podría ser sede de la Expo 2023 debido a los problemas derivados de la Covid-19 y la crisis económica, después de que se le adjudicase a Buenos Aires en 2017.

Después de este bache, el país ha decidido volver a intentarlo con la Expo de 2027 y apostando por otra ciudad, en concreto San Carlos de Bariloche.

Así ha sido la presentación de la Expo 2027 de Málaga en París

L. O.

Una prueba recrudecida

De hecho, el director general para la Expo en Málaga aseguró que estos viajes en años anteriores tenían un cariz más «diplomático» que cada vez parece estar más evaporado, sobre todo después de que Estados Unidos recibiera un informe negativo por la comisión de evaluación del Bureau.

«En ese sentido están siendo muy duros. Yo no había conocido nunca un informe negativo pero la vez pasada Estados Unidos tuvo uno, [la Expo] fue declarada inviable pero ellos insistieron mucho con su peso diplomático y consiguieron que no se retirase su candidatura anterior», recuerda Jerónimo Blasco.

«¿Qué puede ocurrir ahora? Que cualquiera de los cinco no pase el examen o que lo pasemos todos. Imagino que Estados Unidos habrá corregido lo que hizo mal y está la duda de qué pasará con Argentina. Es sorprendente que te adjudiquen la Expo anterior, no seas capaz de hacerla y te vuelvas a presentar», opinó Blasco, que además compartió un punto débil de la ciudad que probablemente supone la mayor competencia para la candidatura malagueña y española:

«Hoy Estados Unidos tiene el enorme poderío del país que es pero tiene también un punto débil, y es que desde hace muchos años decidieron que no ponían dinero público y que tenía que salir de patrocinadores. Eso es una gran debilidad porque los patrocinadores suelen imponer. Lo privado es importante que esté pero siempre lo que busca el BIE es que la organización sea pública, y así ha sido en Sevilla, en Zaragoza...».

¿Por qué Málaga esperó tanto para presentarse?

La candidatura de Málaga para acoger la Expo no fue oficial hasta el 26 de enero, pocos días antes de que finalizase el plazo. Entonces se debía esperar a que el Gobierno central comunicase su apoyo al proyecto. Según Jerónimo Blasco, el retraso se produjo porque Barcelona estaba planteándose presentarse a la Expo 2030, cuestión que debía aclararse porque un país no puede presentarse a dos exposiciones a la vez.

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