El flamante propietario del Málaga CF, Abdullah Bin Nasser Al-Thani, ha comunicado al todavía presidente de la entidad de Martiricos, Fernando Sanz, que no cuenta con Juan Ramón López Muñiz para la próxima temporada. Es una de las decisiones en firme que ha tomado el jeque qatarí para la temporada 2010/11.

Bin Nasser tenía claro desde que apostó por adquirir las acciones del club blanquiazul que quería un entrenador de talla internacional, como expresó en diversas webs qataríes a finales de mayo. Fernando Sanz, por su parte, ha intentado convencerlo de la necesidad de que Muñiz continúe como máximo responsable del banquillo albiceleste, o bien dentro de la dirección deportiva, en parte por su total confianza en el asturiano y en parte porque tiene todavía un año más de contrato, hasta el 30 de junio de 2011.

Muñiz, de confirmarse de forma oficial su salida del Málaga CF, tendría que ser indemnizado, al igual que ocurrió cuando fue destituido en el Racing de Santander hace ahora un año.

Eso sí, Sanz sigue defendiendo a capa y espada la continuidad del gijonés. Estos días van a ser decisivos para intentar por última vez convencer al jeque, algo que por otra parte parece casi imposible. Y es que la confianza de Sanz en Muñiz es máxima. El dirigente lo ´reforzó´ en el cargo, ya que además de querer que siguiera como entrenador, le dio plenos poderes en la dirección deportiva -como hiciera cuando también era el entrenador en Segunda División, en la campaña 2006/07- junto a Sandro Sierra.

Nuevo panorama

Curiosamente, era hasta hace unos días Juan Ramón Muñiz el que movía los hilos en materia de fichajes, ya que tenía vía libre por parte de Fernando Sanz a la hora de entablar negociaciones para reforzar al equipo de cara a la próxima campaña. No hay que olvidar que Sandro Sierra, adjunto a la dirección deportiva hasta que salió del club Ricardo Rodríguez, a su vez ha estado trabajando en la composición de la plantilla de la temporada 2010/11 y continúa haciéndolo, mientras no reciba órdenes contrarias.

Muñiz está algo más apartado durante estos días de la planificación del equipo para la próxima campaña, a la espera de conocer de forma oficial la decisión del nuevo dueño de la entidad de Martiricos, algo que debería saberse a finales de la presente semana.

De ratificarse el adiós de Juan Ramón López Muñiz, finalizará un ciclo con el entrenador que había salvado al Málaga CF del descenso a Segunda B en la Liga 2006/07, lo subió a Primera División en la campaña 2007/08 y lo ha mantenido en la máxima categoría, aunque con más sufrimiento de lo normal -en el último instante- en la temporada recién terminada.

Consejero delegado

Fernando Sanz, mientras, se aloja hasta el viernes de esta semana en el Hotel Marbella Club, establecimiento donde se está gestando una parte decisiva del futuro del nuevo Málaga, que tiene como cabeza visible al jeque qatarí Abdullah Bin Nasser Al-Thani, aunque durante unos tres años será Fernando Sanz su máximo exponente y el encargado de llevar la tranquilidad durante la época de transición.

Sanz, a pesar de tener domicilio en Marbella, pasa estos días junto al representante legal de Al-Thani, que es a su vez consejero delegado de una de sus importantes empresas. Ambos negocian el cargo que tendrá en el nuevo organigrama el todavía máximo dirigente malaguista -hasta el próximo 27 de julio, fecha del traspaso de poderes-, y el sueldo que percibirá durante las tres temporadas en las que será uno de los máximos responsables, justamente hasta que el Málaga CF finiquite la deuda que mantiene con los acreedores, derivada del procedimiento concursal.

En un principio se había barajado la posibilidad de que Fernando Sanz siguiera siendo el presidente, también se especuló con que fuera una especie de consejero delegado e incluso un alto ejecutivo en el status quo resultante de la venta del club.

En cualquier caso, el puesto concreto que ocupará el dirigente madrileño a partir del 27 de julio podría no conocerse a lo largo de esta semana. Por el momento, no ha trascendido la cantidad que cobrará Fernando Sanz, que pasará a tener un cargo con remuneración fija.