Éxtasis antes de la Champions

Sólo un partido, sólo unos minutos sobre el césped, un gol y una asistencia han sido suficientes para que Javier Saviola sea ya el nuevo ídolo de la afición malaguista. Ayer el «Conejo», como es apodado cariñosamente desde su etapa en River Plate, puso patas arriba La Rosaleda en su puesta de largo. Si a su presentación conjunta con Iturra y Onyewu acudieron apenas 200 personas, ayer se dio todo un revolcón de masas con casi 28.000 almas blanquiazules. Marcó un gol de crack, dio una asistencia de genio a Joaquín y se marchó en el 68 entre aplausos y gritos de nuevo ídolo. Así es el malaguismo, enamorado de sus jugadores y entusiasmado con el nuevo Málaga.

Sin duda, los números y la realidad son para ilusionarse con este nuevo Málaga, que parece una prolongación del que sorprendió el curso pasado. Está por ver si es mejor o peor que el de hace unos meses, donde Cazorla ponía la magia y Rondón los goles, acompañados de Maresca y Mathijsen, entre otros que ya no están. Pero de momento, el conjunto de Pellegrini cumple. Quizás con menos pomposidad de la acostumbrada, con más trabajo y sacrificio que en épocas pasadas, pero con la misma eficacia que nos tenía acostumbrados. Es decir, con victorias que lo elevan a las posiciones más altas de la clasificación.

Este Málaga, desde luego, tiene el gen ganador. Con diez puntos sobre 12 disputados ha cuajado su mejor arranque histórico. Ha cumplido con el guión, se podría esperar a tenor de los rivales en este inicio, pero a veces la normalidad brilla por su ausencia. Desde luego, este equipo se ha reinventado y sigue dando alegrías.

En este remozado equipo también hay muchos nombres propios. El primero es el de Manuel Pellegrini, que incluso cambiando su sistema de juego (ayer pasó a un 4-1-4-1) ante la usencia de Toulalan, ha sabido mantener el sello con unos u otros jugadores a sus órdenes. El segundo es el ya mencionado Saviola, que se eleva como la bandera del nuevo Málaga. Si es capaz de mostrar a lo largo de todo el curso el nivel de ayer en La Rosaleda podríamos estar ante el gran «chollo» del verano. No es de extrañar que fuera una petición expresa del técnico malaguista.

Después le siguen el resto de componentes, con mayor o menor acierto, pero todos aportando. Santa Cruz se estrenó de blanquiazul, aunque está lejos de su mejor versión. Camacho parece haber alcanzado la madurez necesaria para ser el único mediocentro de este Málaga de Champions. Portillo por fin marcó para desprenderse definitivamente de todos los complejos que ya se había sacudido este verano. Recio volvió a jugar, la defensa se muestra solvente y segura, Joaquín tiene gol y arte para rato, Isco mantiene su calidad... Un cúmulo de circunstancias que transforman la seguridad malaguista en plena efervescencia antes de ir a Europa.

Ayer, sin embargo, no era un partido ni cómodo ni asequible. El Málaga lo sabía y Pellegrini presentó un once de garantías sin mirar al importante duelo del martes con el Zenit de San Petersburgo en la Liga de Campeones.

El calor fue un factor desequilibrante, sin duda, pero atacó a los dos conjuntos por igual. El Málaga salió menos enchufado que de costumbre. No mostraba su liderazgo habitual. Pero pronto tomó las riendas del choque y en una acción rápida, Saviola puso de cara el partido (28´).

Al descanso se llegó con la ligera ventaja y sin el miedo por el conjunto granota. Pero nada más reanudar el choque, Míchel puso la igualada con un disparo descomunal (47´). Tras varios minutos de incertidumbre, Saviola se sacó otro conejo de la chistera en forma de pase para que Joaquín desequilibrara el partido (58´) e hiciera olvidar a Velasco Carballo, que con sus malas artes hizo peligrar la victoria. Portillo encontró el camino del gol para cerrar la puerta de la antesala al cielo, que es la Champions.

Ficha técnica

3 - Málaga: Caballero; Sergio Sánchez, Weligton, Demichelis, Monreal; Isco, Portillo, Camacho, Eliseu (Duda, m. 81); Joaquín (Recio, m. 73) y Saviola (Santa Cruz, m. 68).

1 - Levante: Munúa; Chris, Ballesteros, Navarro, Juanfran; El Zhar (Pedro Ríos, m. 62), Diop (Rubén, m. 75), Barkero (Pallardó, m. 65), Juanlu; Míchel y Gekas.

Goles: 1-0, m. 27: Saviola. 1-1, m. 46: Míchel. 2-1, m. 58: Joaquín. 3-1, m. +90: Portillo.

Árbitro: Velasco Carballo (Colegio Madrileño). Expulsó, por doble tarjeta amarilla, al local Sergio Sánchez (m.35 y m. 87) y además amonestó a Camacho (m. 54) y Caballero (m. 79), y a los visitantes Chris (m. 8), Ballesteros (m. 25), Diop (m. 69) y Míchel (m. 86).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de Liga de Primera División diputado en el estadio de La Rosaleda ante unos 30.000 espectadores.