Después de la tormenta suele llegar la calma y tras varios días traumáticos para el malaguismo por la salida de tres de sus buques insignia, los números y las cifras cobran protagonismo tras el velatorio de los sentimientos. No deja de doler que Juanmi y los «Samus» forman parte del pasado blanquiazul, pero la realidad económica de la entidad malaguista vive otro presente y, sobre todo, augura también otro futuro.

Las tres dolorosas salidas de los tres canteranos además de la venta «pactada» de Portillo al Real Betis dejan un buen pellizco en las arcas malaguistas. Unos ingresos que sirven para hacer frente a los pagos inmediatos del club y también para crear cierta estabilidad económica en la entidad. Al menos por el momento, ya que el club deberá seguir haciendo frente a otras cuestiones conforme vaya avanzando la temporada.

En total, el club ha vendido por valor de 25,5 millones de euros, pero para sus arcas sólo han ido a parar 17,5. De los 7 millones por la venta de Juanmi al Southampton, seis se quedan en Martiricos. El conjunto inglés realizará el desembolso en dos pagos. Uno inmediato y otro más adelante. Por lo tanto, el club podrá contar con ese dinero para sus previsiones.

El club también ha ingresado 1,5 millones por la venta de Portillo al Real Betis en una cláusula obligatoria para los verdiblancos si ascendían a Primera.

Por último, en la mayor operación hasta la fecha del verano, el Málaga CF ha ingresado 10 millones de los 17 en los que se ha valorado la operación de los «Samus» al Villarreal. La mitad de Samu Castillejo pertenecía a un fondo de inversión -no es el único jugador de la actual plantilla que tiene la misma situación- mientras que el agente de Samu García habría percibido el 10 por ciento del traspaso del jugador. El Villarreal, por su parte, también dividirá los pagos, pero un grueso importante del traspaso ya se habría realizado en el primer plazo.

Pagos inmediatos

¿Qué pagos puede hacer frente el Málaga CF en las próximas fechas? Los ingresos en la entidad provocan que el conjunto blanquiazul pueda afrontar los pagos más inmediatos. Algunos de ellos son el grueso de las fichas de los jugadores, algunas primas atrasadas, pagos a proveedores e incluso el último pago del proceso concursal, que ronda los 500.000 euros. Pagos que evitarán denuncias de jugadores o de instituciones, lo que podría dejar un panorama más complejo. Queda evitado así cualquier amago de medida drástica por parte de LFP, como ya sucedió en veranos pasados.

Sin embargo, estas ventas podrían no ser las únicas del verano. Casi con total seguridad saldrán más jugadores, aunque sin la presión añadida de vender para sobrevivir. Algunos incluso ya buscan destino en el mercado para no continuar en el Málaga CF. Eso sí, el club no parece estar dispuesto a ponerlo tan fácil como las otras salidas. El tiempo dirá.