El humilde San Félix juvenil, equipo vinculado al Málaga CF, ha estado a punto de entrar en los libros de historia tras quedarse a las puertas de remontar en el Pedro Berruezo una eliminatoria que estaba completamente desahuciada. El equipo malagueño, que perdió 6-1 con el Real Madrid en la ida de las semifinales de la Copa del Rey Juvenil, puso un 4-0 en la primera mitad, pero no consiguió cerrar la remontada y acabó su participación por 4-1. En cualquier caso, honores para el San Félix, que se despide con una victoria y con la cabeza bien alta.

La primera parte de los malagueños fue de ensueño. Y es que pocos pensaban que el San Félix, formado por jugadores de primer y segundo año juvenil, pudieran poner contra las cuerdas al Real Madrid. Pero el equipo de Alejandro Acejo salió con el cuchillo entre los dientes, liberados de presión y con ganas de agradar.

Pero tenía un reto casi imposible por delante, el de remontar un 6-1 en contra de la ida. En cualquier caso, el equipo malagueño tenía que ir paso a paso. Marcó el primero en el 27' por medio de Ismael. Pero no tardó en marcar el segundo (Vicario, 30') y el tercero (César, 33'). Una locura que comenzaba a tomar forma. Antes del descanso ya había marcado el cuarto (Ismael, 41'), lo que invitaba a soñar con el milagro.

El San Félix le dio un meneo difícil de recordar al equipo de Guti. Fue más intenso, más fuerte, con más calidad, con más acierto y más equipo. Todo en 45 minutos memorables.

En la reanudación, las fuerzas se igualaron. Los de Acejo bajaron revoluciones porque vieron la meta cerca. Contemporizaron. Y eso lo aprovechó el Madrid. Primero en una expulsión de Vicario en el 55' por una agresión a un jugador del Madrid. Y luego con el gol de Pedro en el 73', que ponía el 4-1 y tierra de por medio. Con uno menos, el milagro se complicaba y de ahí al final, el marcador no se movió.