Explosión de júbilo en La Rosaleda. El Málaga CF consiguió la primera victoria del curso en su estadio tras deshacerse del Oviedo de la mano de un gran Antoñín, que fue claro protagonista del encuentro tras marcar el 1-0 y provocar el penalti del segundo. El canterano blanquiazul fue el gran artífice del segundo triunfo consecutivo de los de Víctor Sánchez del Amo, que consiguen abandonar así los puestos de descenso.

Hubo que sufrir hasta pasado el minuto 97, pero esta vez los puntos se quedaron en casa. Los goles de Antoñín y Adrián, de penalti, dieron una victoria importantísima y muy trabajada al Málaga. Ibra le puso picante al final del encuentro tras hacer el 2-1 después de un fallo de Munir, sin embargo, los malagueños resistieron y se llevaron tres puntos de oro.

El conjunto blanquiazul salió decidido a por el partido y en los primeros minutos ya rondó la portería ovetense. A balón parado llegaban las primeras ocasiones de peligro para los de Víctor. Desde el inicio, el Oviedo intentó enfriar el partido con continuas pérdidas de tiempo, y antes del cuarto de hora de encuentro Galech Apezteguía, árbitro del choque, ya le tuvo que llamar la atención a Nereo Champagne, portero carbayón.

Los parones provocados por los visitantes eran continuos. En el ecuador de la primera mitad Bárcenas tuvo que entrar por el lesionado Sangalli. Nada de eso afectó al Málaga, que siguió dominando en busca del gol que le pusiera en ventaja. Y así, un córner botado por Pacheco se estrelló en el palo después de un despeje defectuoso de Champagne y apunto estuvo de convertirse en el 1-0. Mikel y Renato, tras dos acciones individuales, también tuvieron opciones para perforar la meta asturiana, pero de nuevo estaba fallando la puntería. Primer tiempo muy bueno del equipo de Martiricos, que estaba haciendo merecimientos suficientes para llevarse el triunfo y solo le faltaba el gol para completar la machada.

Y en el segundo tiempo los goles entraron y la victoria se quedó en casa después de 140 días. Antoñín frotó la lámpara y en poco más de cinco minutos resolvió la contienda. En el minuto 55, el canterano blanquiazul ganó un balón en largo a la espalda de la defensa, se marchó de su marcador dentro del área y la puso al palo largo para hacer rugir a La Rosaleda. Definición perfecta imposible para Champagne para adelantar al Málaga.

Y con el Málaga ya en ventaja, Antoñín se inventó otra jugada magistral para provocar el penalti que Adrián convirtió en el 2-0. El de La Palmilla se marchó en velocidad de su defensor, que lo trabó y el colegiado señaló el punto de penalti. Adrián batió al meta visitante pese a que adivinó la dirección del lanzamiento.

Dos goles de renta y situación controlada. El encuentro parecía finiquitado pero un error de Munir permitió al Oviedo volver a soñar con rescatar un punto. En el minuto 84, al portero marroquí se le escapó el balón tras tocar en el larguero e Ibrahima, que había entrado poco antes, hizo el 2-1. Tuvo que sufrir el Málaga para amarrar tres puntos que esta vez se quedaron en La Rosaleda. Víctor Sánchez del Amo fue expulsado por protestar demasiado, según criterio del colegiado, y los blanquiazules tuvieron que resistir los más de siete minutos que el trencilla alargó el encuentro. Pero por primera vez este curso, la victoria se quedó en Martiricos.

Fiesta en La Rosaleda tras el pitido final con una afición exultante tras recibir el primer regalo en la casa de la temporada y con una plantilla haciendo piña sobre Munir y acercándose hasta el Fondo Sur para celebrar el triunfo con los suyos.

Con esta victoria, segunda consecutiva, el Málaga logra abandonar los puestos de descenso y sube hasta la 16ª posición, a la espera del resto de resultados de la jornada. Los de Víctor Sánchez del Amo siguen creciendo y tiene la oportunidad el próximo viernes en Ponferrada de dar un nuevo salto clasificatorio si consiguen asaltar El Toralín. ¡A seguir!