Primera RFEF

SD Amorebieta, un espejo en el que mirarse

El conjunto vasco ha logrado regresar a Segunda División de manera directa, como campeón de grupo, un año después de bajar

Solo mantuvo dos futbolistas de la plantilla que firmó el descenso

El Amorebieta celebra su ascenso a Segunda División.

El Amorebieta celebra su ascenso a Segunda División. / @SDAmorebieta

Manuel García

Manuel García

La Primera RFEF es un ‘pozo’ en el que se necesita mucho acierto en las decisiones y en lo que ocurra sobre el césped para poder salir rápido de ahí. Todo el mundo es consciente de ello. El Málaga CF tiene un largo verano por delante para adaptar tanto el club en general como la primera plantilla a las exigencias que plantea la tercera categoría del fútbol español. Las buenas o malas decisiones que se tomen en las próximas semanas en la parcela deportiva tendrán mucha incidencia en el resultado final. Y luego ya hará falta también que la pelotita quiera entrar, por supuesto.

El objetivo de la entidad de Martiricos no puede ser otro que el de regresar cuanto antes al fútbol profesional. Y si puede ser tras solo una temporada en los infiernos, mejor que mejor. Lograr el ascenso a la primera en una división tan igualada es difícil, pero este año el Amorebieta ha demostrado que haciendo las cosas bien es posible. El conjunto vasco descendió el pasado curso a Primera RFEF y ha conseguido salir campeón del Grupo II para regresar a Segunda División solo un año después. Ese, y no otro, debe ser el espejo en el que deben mirarse los de Sergio Pellicer.

Renovación total

Existe estos días en Málaga mucha preocupación porque hay jugadores que rechazan quedarse. Incluso los que aún tienen contrato en vigor tampoco tienen seguro estar presentes en la plantilla el próximo curso. Pero justamente el Amorebieta también es buen ejemplo de que una limpieza total de la plantilla puede ser el primer paso hacia el ascenso. El conjunto vasco solo ha mantenido en este curso 2022/23 a dos futbolistas de los que firmaron el descenso hace un año -Unai Marino (portero) e Iker Seguín (extremo izquierdo)-.

En lo que sí tuvo continuidad es en el banquillo, un caso muy similar al actual del Málaga CF. Haritz Mujika llegó en marzo del 2022 al cuadro vasco y, pese a no conseguir la salvación, el club apostó por su permanencia en el banquillo. Al igual que el conjunto blanquiazul ahora con Sergio Pellicer.

Sergio Pellicer, presentado ayer en la sala de prensa de La Rosaleda.

Sergio Pellicer, presentado ayer en la sala de prensa de La Rosaleda.

La dirección deportiva del Amorebieta supo moverse bien en el mercado y conformó un grupo totalmente renovado que le ha llevado hacia el éxito, pese a que en el arranque de temporada tuvieron muchas dudas. El club ‘pescó’ bien en equipos de Primera y Segunda RFEF y también apostó por algunos cedidos de clubes de LaLiga SmartBank, y el plan no les ha podido salir mejor.

Los otros descendidos

El resto de conjuntos que bajaron desde LaLiga SmartBank a Primera RFEF han tenido temporadas dispares. Además del ascenso directo del Amorebieta, el Alcorcón y la Real Sociedad B están peleando por subir de nuevo a la categoría de plata en el play off. El cuadro madrileño estuvo cerca de acabar primero en el Grupo I, pero finalmente le arrebató la plaza el Racing de Ferrol y terminó segundo. El filial txuriurdin, por su parte, ha entrado a esas eliminatorias por el ascenso como quinto clasificado.

Al que le ha ido peor de los cuatro es al Fuenlabrada, que ha terminado en la 11ª posición después de haber coqueteado con un terrible descenso a Segunda RFEF. Evitó la quema en las últimas jornadas.

Lo que muestra esto es que haciendo las cosas bien y con cabeza, regresar al fútbol profesional a la primera es posible, ya lo hemos comprobado esta temporada, pero también hay casos sonados donde se han pegado grandes batacazos. Es el caso del Deportivo de la Coruña, que vuelve a estar ahora pelando por subir en el play off tras dos fracasos consecutivos en su primeras temporadas en la categoría de bronce.