José Lorenzo será el presidente del centenario de la Sociedad Recreativa y Cultural Casino Marbella, tras lograr el cargo en unas disputadas elecciones marcadas por una alta participación y en las que se impuso a la candidatura alternativa por nueve votos de diferencia. Abogado de profesión, forma parte de una familia muy vinculada con la asociación privada más antigua de la localidad, fundada en octubre de 1920.

¿Cómo recibió la noticia de que se había impuesto en las elecciones presidenciales?

Con mucha alegría y, sobre todo, ilusión. No me lo esperaba. Mi candidatura surgió después de que un grupo de socios se acercara a mi para que lo liderara. Decidimos dar el paso dos días antes de que se cerrara el plazo para presentar la candidatura. Al principio dije que no, pero la insistencia e ilusión del grupo me hizo cambiar de opinión.

¿Cómo define a los miembros de su Junta Directiva?

Está marcada por la ilusión para hacer un bonito proyecto para el Casino y que a mi me transmitió para dar el paso adelante. Y, por primera vez en la historia del Casino, entran dos mujeres en la Junta Directiva.

¿En qué estado se encuentra el Casino que hereda?

Desde el punto de vista económico, tenemos una deuda de unos 40.000 euros y un déficit en el servicio de barra que nos cuesta 2.000 euros al mes. Desde la óptica cultura, la junta saliente ha dejado la asociación en un lugar importante en la sociedad marbellí. Nosotros queremos seguir esa línea y potenciarla con más ideas.

¿Cuáles son los principales proyectos que quiere desarrollar durante su gestión?

Mi deseo es crear un club juvenil. Los chicos de 12 a 16 años no sabe dónde ir. ¿Por qué no hacemos aquí ese club? El objetivo es crear un espacio en el que los jóvenes puedan venir a conversar, a charlar, evidentemente con sus dispositivos electrónicos, y crear un punto de unión para ellos. Es importante que entren los jóvenes al Casino. La edad media de la asociación está en los 70 años.

¿Alguna otra novedad?

También quiero crear un rincón cofrade en el Casino. Marbella carece de un sitio en el que puedan reunirse los hermanos del municipio. Me gustaría que cada hermano que viniera al Casino se sintiera identificado con la asociación y su hermandad.

Uno de los principales problemas del Casino es el descenso en el número de socios ¿A qué se debe? ¿Qué quiere hacer para remediar la situación?

Los socios que en su momento se dieron de baja están decidiendo volver. No sé por qué, pero están regresando. Quiero reestructurar el Casino para incentivar a la gente a que se haga socia. Aquí nos mezclamos los que ven el fútbol, lo que están en la cafetería o los que vienen a charlar. Al mismo tiempo, tenemos una terraza fantástica casi siempre vacía y un frontal en forma de L en la mismas situación. Para atraer a las personas al Casino hay que abrirse también a los que no sean socios. ¿Por qué una persona que viene de vacaciones desde Dinamarca no se puede tomar un café en el parque de La Alameda?

¿Tiene el Casino que abrirse a la sociedad?

Por supuesto. Nuestros estatutos dicen que el Casino es punto de enlace entre los ciudadanos de Marbella. Hay que abrir las cortinas y subir las persianas al resto de la sociedad para que sea un punto de encuentro.

¿Qué tiene pensado para celebrar el centenario del Casino?

Tenemos muchos proyectos encima de la mesa. Hemos creado una comisión para organizar ese centenario que está estudiando la historia de la asociación y documentándose. Tenemos muchas ideas y las tenemos que ir concretando en los próximos meses.

¿Cree que el Casino se sigue viendo como un club elitista, selecto, exclusivo?

No lo creo. Es verdad que a nuestros socios les gusta tener una privacidad para hablar con el resto de socios o jugar una partida en la zona de arriba del Casino, pero no creo que sea elitista o exclusivo. Lo que hacemos es respetar los momentos de los socios.

¿Cómo valora la oferta cultural de Marbella?

Marbella es una ciudad puntera culturalmente. Tenemos multitud de museos de todas las categorías y un teatro por el que este mes de febrero y el resto del año pasan las grandes espadas. Nosotros queremos ayudar a la proyección cultural de Marbella sin solapar lo que el municipio.