Fue un crimen entre paisanos. De búlgaro a búlgaro. El primero de una serie asesinatos con armas de fuego en la Costa del Sol occidental que durante los últimos meses de 2019 pusieron en jaque a Policía Nacional y Guardia Civil. El autor, que vino a España para eliminar a su objetivo, presuntamente acribilló a tiros a la víctima en el vehículo del primero, abandonó el cuerpo en la cuneta de la A-7176, carretera que une los municipios de Marbella e Istán. Consumado el asesinato, huyó del país. El cuerpo fue hallado el 27 de octubre. Los investigadores de la Policía Nacional apenas tardaron en identificar al presunto asesino diez días y cinco más localizarlo en Alemania con la ayuda de la policía alemana.

La inspección del vehículo reveló restos de sangre. "La diligencia no resultó fácil, ya que el sospechoso habría sometido al coche a una limpieza exhaustiva antes de huir de España para tratar de eliminar vestigios, llegando incluso a cambiar las matrículas del automóvil para tratar de asegurar su impunidad", ha explicado hoy la Policía Nacional. Además de otros vestigios relacionados con el crimen, los agentes encontraron en el vehículo 5,6 kilogramos de cocaína en un compartimento oculto. El investigado, de 46 años, fue arrestado en Alemania por su presunta implicación en los delitos de asesinato, tráfico de drogas, falsedad documental -transitaba por los diferentes países de la Unión Europea con documento falsificado- y tenencia ilícita de armas. Actualmente se encuentra en una prisión germana a la espera de ser extraditado a España.

Durante esos primeros quince días, la Policía Nacional hizo un trabajo de campo brillante. A partir del lugar en el que fue hallado el cuerpo, los agentes reconstruyeron meticulosamente el itinerario de huida. Inspeccionaron palmo a palmo ese recorrido y el esfuerzo tuvo su recompensa con la localización de una vaina utilizada en el crimen a más de un kilómetro de distancia del cadáver.

Por su parte, en un registro realizado en la vivienda que el sospechoso usó durante su estancia en Marbella, los agentes localizaron una pistola taser y numerosos vestigios relacionados con los hechos.