Los pescadores de Marbella seguirán faenando para garantizar alimentos durante el periodo de cuarentena para evitar la extensión del coronavirus.

La Cofradía ha acordado mantener el funcionamiento ordinario con la apertura de la lonja y la subasta en los horarios habituales en un momento «crucial» para los vecinos. «Es nuestra responsabilidad como suministrador de un alimento básico como es el pesado. Somos el primer eslabón de una cadena», señaló el patrón Mayor de la Cofradía, Manuel Haro.

El colectivo solicita que en el espacio de la lonja y el muelle se persone únicamente el personal «autorizado e indispensable» y que los «asiduos no compradores» se abstengan de acudir.

«La flota pesquera de Marbella entiende y asume su responsabilidad en esta crisis internacional y lo que pretendemos con esta medida, consensuada con la administración y otras cofradías, es impedir que la ciudadanía quede desabastecida en este momento crucial», indicó Haro, que destacó que los pescadores extremarán las medidas de higiene y seguridad.

«El pescado es un alimento básico y los profesionales debemos asegurar su captura y óptima comercialización a tiendas y supermercados es una responsabilidad de toda una cadena y nosotros somos el primer eslabón», agregó.