Los comerciantes del Mercacentro de Fuengirola se quejan de las instalaciones, que consideran obsoletas. Este edificio, de más de 20 años, presenta una serie de carencias que, hasta ahora, no tienen respuesta por parte del equipo de gobierno. La situación afecta a más de 50 comerciantes.

"No podemos competir con los grandes centros comerciales. La comodidad para el cliente deja mucho que desear. No hay un sistema de ventilación adecuado y las puertas que siempre están abiertas hacen que en verano el calor sea insoportable y en invierno no podamos ni quitarnos el abrigo para atender en el mostrador", afirma una de las dependientas.

Los afectados aseguran que la clientela se ve resentida de esta situación pues en otros comercios se encuentran más cómodos.

Otra carencia viene dada por las numerosas goteras que presenta el edificio. "Cuando llueve se nos moja mucha mercancía y cuando la lluvia es fuerte hemos sufrido inundaciones importantes", señala un comerciante.

A estas situaciones hay que sumar la necesidad de renovar el ascensor y el montacargas. "Es cierto que hace poco nos instalaron unas escaleras mecánicas pero eso no es suficiente. Estamos en condiciones precarias", afirma una dependienta.

La seguridad es otro de los temas que más preocupa a los empresarios del Mercacentro. El vigilante jurado ha sido retirado del lugar. A cambio se han instalado unas cámaras de seguridad. "Esto no es suficiente. El pasado fin de semana tuvimos que llamar a la Policía Nacional porque un indigente comenzó a insultar a una de las dependientas. Nos tenemos que defender solos y ya hemos sufrido varios robos", indicó una de las afectadas.

Por su parte, el grupo municipal socialista ha denunciado la situación de estos comerciantes y ha criticado a la alcaldesa, Esperanza Oña, por destinar 1,5 millones de euros del Fondo Estatal de Inversión Local a la construcción de un nuevo edificio para la televisión municipal en vez de utilizarlo para la renovación del Mercacentro.