­La candidata por el PP a la alcaldía de Ronda, Maripaz Fernández, vivió ayer una jornada de celebración a pesar de haberse quedado a dos ediles de la absoluta.

Tras ser desbancada del poder mediante una moción de censura de PSOE, IU y PA, en 2016; el incremento en votos de este domingo -985 papeletas más que en 2015- le ha permitido dar la sorpresa y situarse con claras opciones de gobierno al posicionarse con una holgada diferencia a tres ediles del PSOE (9 sobre los 6 concejales logrados por la formación de la socialista Isabel Aguilera). En declaraciones ayer a La Opinión de Málaga reconoció aún no haber dedicado tiempo a «analizar» los resultados con calma, ya que durante el día después se centró en agradecer a los rondeños «el cariño y la confianza depositada». «De hecho, aún no lo hemos analizado», declaró, para añadir que busca prioritariamente «la estabilidad» aunque reconoce que mantiene todas las opciones abiertas. Aún así se plantea como lógicas las escasas posibilidades de acuerdo con IU, Contigo Ronda (nueva formación con la que concurre la andalucista Isabel Barriga) y evidentemente PSOE, promotora la moción de censura. De esta forma, las perspectivas pasan por gobernar en solitario con apoyos puntuales, como apuntó ella misma, o llegar a un acuerdo con las restantes fuerzas políticas (Ciudadanos y APR). Aún así concluyó que no se «decanta» por ninguna y prefiere que la ciudad en este mandato se relaje después de tanta tensión y años de tripartito .