El director general de la RTVA, Pablo Carrasco, admitió ayer un «previsible» recorte en las transferencias de la Junta para los presupuestos de 2011, aunque advirtió de que la reducción del gasto no afectará a la calidad, y anunció que, pese a todo, los ingresos serán «similares» a los de 2010.

En su comparecencia en comisión parlamentaria, Carrasco recordó que desde el 2009, cuando fue nombrado director general de la RTVA, se propuso una reducción del gasto sin que esto afectara a la calidad del servicio, por lo que puso en marcha medidas como la congelación de los sueldos de los directivos, y el recorte en el organigrama directivo en más de un 18 por ciento.

La reducción del gasto y la optimización de los ingresos permitirá cerrar el 2010 con un déficit inferior al año anterior, según Carrasco, quien ha aclarado que, pese a todo, el margen de actuación «cada vez es menor y bastante reducida» porque hay partidas que no se pueden rebajar. Concretamente, la de personal, que supone el cuarenta por ciento del total del presupuesto, y la participación en cines y documentales, que se ha incrementado al 6 por ciento.