Sr. jefe de la Policía Local: Soy una ciudadana normal de Málaga, y esta carta no es una crítica hacia ustedes, sino al contrario. Escribo unas letras para darles las gracias por el buen hacer, amabilidad, compañía y comprensión de dos de sus agentes de policía del distrito de El Palo, sobre todo en estos momentos. Me gustaría que hiciera llegar mi agradecimiento a los dos agentes de policía con número: 783 y 982. Le cuento:
En la madrugada del día 22 de mayo, mi madre sufrió un ictus cerebral, encontrándose mi padre con 84 años solo en la casa junto a mi madre, llamo al botón de Teleasistencia manifestando que mi madre se había caído al suelo y no podía levantarse, quienes rápidamente llamaron al 112. Como usted sabe el 112 derivó la llamada a Policía Local, personándose en el domicilio de mis padres sito en Paseo de Miramar nº 41-2º A. Los dos agentes arriba mencionados, quienes en todo momento estuvieron calmando a mi padre, que estaba muy alterado por la situación. Tras la llegada de los dos agentes de policía, llegué yo, y es donde puedo decirle de la atención excepcional, delicadeza y consideración con mi madre que la pobre presentaba un grave cuadro de ictus cerebral y la ayuda de los mismos , uno para mantener a mi madre levantada tal y como nos había indicado el médico de la ambulancia que fue apremiada por los agentes de policía, mientras el otro se bajaba a la calle a fin de parar a la ambulancia para que la misma no se perdiera. Nos acompañaron en todo momento y calmaron habida cuenta del estado de nervios que teníamos todos, ofreciéndose incluso para acompañarnos al hospital por si no éramos capaces de conducir.
Quiero agradecerles su comportamiento intachable, su buen hacer, su buen servicio, y manifestarle que con agentes así da gusto pagar los servicios de una policía siempre muy criticada, por la única razón de que algunas veces tocan el bolsillo de los ciudadanos, pero que luego se olvidan de dar las gracias en servicios altruistas que prestan.
Muchas gracias por todo y espero que les haga llegar a los dos agentes mi más sincera gratitud.
