Cartas al director

Se conocían desde hace mucho tiempo, compitiendo por la misma meta: el poder. Incluso habían hecho piña en ciertos puntos beneficiosos para quienes, en la sombra, les mandaban a ambos, como en la reforma de nuestra Constitución o en la Constitución europea. Ahora que, con la crisis, objeto de la ira ciudadana, corren el riesgo de no seguir gobernando uno u otro, por lo que es lógico que acaben uniéndose para seguir compartiendo el poder. Ven que ya no basta un acuerdo puntual, un ligue, sino van a necesitar un lazo oficial, matrimonial, estable.

Rajoy mismo dijo a los suyos que necesitaban alianzas, y ahora su segunda lo ha recalcado. Pero ese noviazgo, como tantos otros, es tempestuoso: el sexo más débil -por su ya magro cuerpo electoral y su tan atormentada alma ideológica- se hace el estrecho, consciente de que, con esa boda, puede perder gran parte del apoyo electoral que aún tiene. De modo que el PSOE consideró una indiscreción las tempranas propuestas de unión de González y Guerra, juntos de nuevo para vender los restos de su partido. En esa negociación, como ya Rubalcaba, Sánchez se hace el enfadado ante los renovados avances del PP en estos días, para reclamar así un contrato matrimonial más favorable. Vamos, las corrientes peleas de novios… en una boda por interés.

Julián Gómez Vidal. Nerja

La solución al maltrato machista

Hace unos días José Luis Rodríguez Zapatero propuso una solución al maltrato que me parece que es la única que puede ser eficaz. Al maltratador le traen al fresco todas la pulseras, banderitas, declaraciones, manifestaciones, etc., porque en realidad se trata de un neurótico que cuando se toma dos copas o por las razones que sean se enardece y se lía a golpes con la mujer y los niños. La solución que propuso y que me parece sumamente eficaz es que las personas maltratadas sepan que tienen la garantía de un refugio seguro; de esta forma el maltratador quedaría abandonado y se vería obligado a tomar medidas para curar su neura.

¿Por qué esto no ha tenido eco en los medios? ¿Acaso es muy caro? Creo que al menos es un asunto de la máxima importancia y digno de debate serio y estudio a fondo.

Pedro Gómez Palacios. Torrox

¿Tranquilidad frente al delirio?

Entre las ideas que expuso Mariano Rajoy sobre el proceso separatista, en su intervención ante miembros del PP en Barcelona el pasado 29 de noviembre, se encontraba esta: «No hemos jugado a la tensión ni al enfrentamiento. Los delirios se calman con tranquilidad y no con más alboroto».

Proverbial es la cachaza que caracteriza a nuestro presidente, y ojalá funcionase su receta universal de «Tranquicilina» para todo; pero hay delirios que exigen actitudes más enérgicas para combatirlos. En Sevilla ha sido juzgado un esquizofrénico paranoide que, padeciendo delirios persecutorios, terminó asesinando a puñaladas a su padre, a su madre y a su hermana, que estaban tranquilamente en su casa. Lo que demuestra que, al menos frente a los delirios persecutorios, no siempre funciona la tranquilidad y las cosas pueden llegar a acabar muy mal.

Convendría que Mariano Rajoy tomara nota de ello, si es que ello no intranquiliza en exceso al señor Arriola, por supuesto.

Miguel Ángel Loma Pérez. Málaga

Fútbol y violencia

Ha tenido que morir un hincha del Deportivo de la Coruña para que todos se echen las manos a la cabeza por lo ocurrido entre los aficionados radicales del Atlético de Madrid (Frente Atlético) y los del Deportivo de la Coruña (Riazor Blues). ¿No se habían dado señales previamente? Cualquiera que vaya a un campo de fútbol sabe de la violencia que se mueve en torno al mundo del fútbol.

Insultos, racismo y xenofobia, lanzamiento de objetos varios al campo, cánticos en algunos campos contra Aitor Zabaleta o Antonio Puerta, banderas fascistas en los estadios, peleas entre aficionados radicales... es algo muy habitual en torno al mundo del fútbol. ¿Qué se ha hecho mientras tanto? ¿Cuántos campos se han cerrado? ¿Qué cuantía han tenido las multas? ¿Cuántos equipos de fútbol se han atrevido a expulsar a sus hinchas más radicales? ¿De verdad que no había antecedentes?

Este, nos guste o no, es el fútbol diario en nuestro país, nos guste o no, aunque algunos parecen que no se hayan dado cuenta hasta ahora.

Jesús Martín Ostios. Málaga