Querido Diego, me consta que ya has llegado a la meta. He recibido esta misma mañana un fax que acusa recibo de tu presencia. Lo firma Antonio Cazorla, que desde su pequeño despacho en la Federación de la calle Sondalezas del cielo, está ocupado haciendo los calendarios de la nueva temporada. Si no lo ves, no te preocupes, estará sellando licencias, cumplimentando papeles, o quien sabe, lo mismo ha bajado a comprar papel de calco y cinta para la Olivetti 98. Lo conoces bien, es un poquillo gruñón, pero al final cumple y termina cediendo. Llévale las fichas con tiempo, que le gusta revisar todo con detenimiento, y de paso dile que le encargue a la imprenta los abonos y los carteles, que seguro los agiliza. Tú, que estabas en todo, le das el visto bueno a los diseños.

No dejes de contactar con Pepelu. Seguro que todavía está celebrando el cambio de nombre del Pabellón de Carranque. Súmate a la fiesta. Ya sabes, es un pedazo de jugador, un grande, por lo que estoy convencido vais a hacer buenas migas. Lo mismo te empuja y sacas un equipo de chicos. Y si no, montad un campus, tecnificación o un clínic. Conocimientos tenéis de sobra y de ello ambos habéis dejado constancia aquí abajo. Valor incalculable el de vuestro legado.

Ni que decir tiene que para presidir el nuevo club que seguro ya estás tramando poner en marcha, hables con Feliciano García-Recio. Recuerda que desde que nos dejó, Málaga no ha vuelto a pisar la elite en chicos. Es un señor con mayúsculas, un caballero de los pies a la cabeza. Tiene muy buenos contactos y una educación que hoy día se echa de menos. Administra como nadie y os representará de lujo. Lo recomiendo.

Si se complica algún tema federativo de calado, también puedes recurrir a Manolo Falkowski. Con sus años de experiencia y su agenda, desatascará lo que le pidas. Para los entrenamientos y los partidos, que mejor que Kiko Álvarez para que te haga todos los reportajes gráficos. Es un fenómeno, trabaja a su ritmo, pero cumple. Es un buen tío. Afable. Conectarás pronto con él. Dale recuerdos.

El universitario, ese otro conjunto que has hecho muy grande, no puede estar en mejores manos. Ahí sí que tienes a un verdadero crack. Llama a Carlos Serra. Llégate después del desayuno. Si pasas antes seguro que lo pillas en la piscina haciendo unos largos. No descansa y vive con pasión lo que más le gusta. Os parecéis mucho en sentido. Os entregáis como nadie. Sois combativos por naturaleza, guerreros. Gente del deporte. Sin dobleces. Sin estridencias.

Y a ti Pepa, queé voy a decirte. Que vamos a reparar tu motor. Tu corazón. Tus sueños. Y volverás a montar un tu particular montaña rusa. Y me dirás que lo dejas, que no tiene sentido, que no merece la pena. Y cambiarás de opinión minutos después para decirme lo contrario, que seguimos, que no nos detenemos. Diego nos ha quitado el sueño. Volverán los desvelos, el estrés, la ilusión, la alegría, los sinsabores, las penas, los éxitos. Seguiremos trabajando para salir algún día de esta larga indigencia, por encontrar la estabilidad que nos permita dejar de administrar miserias.

Con Carmen, con Suso, con Alberto... Con todo aquel que quiera poner su granito de arena y tributar con su esfuerzo y cariño un sentido homenaje a Diego. Al alma mater. Al jefe. Al guía. ¡Gracias Diego! ¡Pon luz desde el cielo!