Sube el desempleo en Málaga: 5.649 parados más, casi un cuatro por ciento más, según los datos publicados el martes por el ministerio del ramo, y es el cuarto mes de aumento de las cifras de paro, sólo superada por las Islas Baleares. Respire hondo y espere: en un rato ya se habrán interpretado estas cifras y se estará dejando claro que la subida del desempleo no es tal, sino una ralentización en la creación del mismo, y que, pese a ello, ha mejorado el indefinido, el femenino en el sector servicios, y que el trimestre pasado fue singular. Respire hondo y espere: en breve saldrá un responsable municipal diciendo que en esta ciudad las cosas se están haciendo bien gracias a los cursos de elaboración curricular, que gracias a ello la cifra no es más elevada y que hay que abrir tres incubadoras más porque el secreto está en la masa crítica del emprendimiento. Respire hondo y espere: los mismos que justificaban las cifras de desempleo hablan de que la culpa la tienen la ausencia de medidas de fomento del empleo real, que éste se ha entregado al sector servicios, donde habita la precariedad, baja cualificación y desamparo, el mismo que había hace un año pero entonces no eras tú, era yo. Respire hondo y espere: ya se escuchan las voces autorizadas que reniegan de gastar tanto en luces de Navidad y piden aplicar esos recursos a otras actividades que permitan crear empleo de calidad y estable, sean cuales fueran porque tampoco las aclaran.

Pero usted respire hondo, porque pese al ruido, ese lanzamiento de parado de trinchera a trinchera, ese contrato temporal por obra o servicio con más horas extras que Ben Hur de galeote, esa parte de la California tiesa que le toca, no se lo va a arreglar ni el Ayuntamiento, ni la Junta ni el Gobierno. Continúe a la espera.