El Lunes Santo se quedó huérfano de Cautivo y Dolores del Puente. Más fueron los litros de lágrimas de nazarenos, mantillas, hombres de trono, penitentes y gentes venidas de toda la provincia que los de la propia lluvia, que no fue la verdadera protagonista a pie de calle. Un sin igual revuelo de gentes en torno a las 19.30 horas en la calle Mármoles deambulaban con su teléfono o radio en mano o en la solapa, un pequeño auricular en uno de los oídos pendientes de la decisión que tomarían tres de las cofradías que se debatían entre el sí y el no, ante la previsión de lluvia durante la madrugada.

Sale el sol, tímidamente, para saludar a María de la O que pasea por la Tribuna de los Pobres. Estoy apoyado en una pared en la intersección de las calles Armengual de la Mota y Mármoles y me dispongo a observar a los que pasan de un lado a otro a la espera de las resoluciones concluyentes del Lunes Santo por parte de las cofradías, oigo al fondo la marcha que acompaña a la Virgen de Gitanos. Las tecnologías están en la calle y minuto a minuto se oían comentarios entre personas con una preocupación común. ¿Saldrían las cofradías del Lunes Santo? Sobre todo en Mármoles, el Cautivo era la incógnita mayor. Consultas en el IPhone o en el móvil, a través de internet, a la Agencia Estatal de Meteorología, a los diarios o a los portales cofrades.

Dolores del Puente, al borde de las 20.00 horas, transmite a sus hermanos que no saldrán, la responsabilidad de la dirección, de la cofradía, después de una larga reunión deciden que no pueden arriesgar tanto y que su penitencia este año es no salir y quedarse en su casa hermandad. Es lo que van comentando unos a otros los que allí esperábamos, perfectamente desconocidos, pero ahora unidos para saber al momento, a la mayor brevedad, lo que estaba pasando en cada una de las cofradías, en los rincones de Málaga a través de la Red.

Una mujer, se echa a llorar, alguien de su entorno le pregunta que le ocurre. Ella dice que Dolores del Puente no sale. Y se derrumba entre sollozos. Nos cuenta su padre que lleva esperando mucho tiempo la Semana Santa, ya que es una enamorada de la tradición, una malagueña de pro, apena tiene 20 años y que por mor de sus estudios en Gran Bretaña, el año pasado no pudo venir. «Quiere ver al Cautivo, viene a ver al Cautivo. Pero como Dolores del Puente ya ha dicho que no sale, teme que esta decisión sea un efecto dominó. El año pasado se conformó con ver la Semana Santa en internet en Málaga Televisión. Y este año a última hora le hemos enviado un billete de avión». Quietud.

Twitter.

Saco mi aparato para consultar la actualidad y se me acerca la chica para decirme: «Twitter, consulta Twitter, a ver qué dicen». Me quedo sorprendido cómo tres o cuatro personas totalmente desconocidas hacen a mi alrededor un corro mientras consulto Twitter y leo que Estudiantes no saben si van a salir o no pero que las puertas de la casa hermandad están abiertas y la persona que escribe interpreta que van a salir. Leemos a otro twittero que dice que no, que las puertas se han abierto porque dentro de la casa hermandad hace mucho calor. La confusión se hace mayor y mayor es el número de personas que van llegando hasta nuestra ubicación, ya que vienen de la Tribuna de los Pobres de ver pasar a los Gitanos entre «¡Olés!» y plástico para impedir que el agua deteriore sus valiosos enseres.

Más personas con sus aparatos van llegando y cada uno va diciendo algo diferente y contradictorio. «Canal Sur acaba de decir que Cautivo sale, y he oído en la radio como aplaudían». Poco después en Facebook de Bajo Palio, y en la propia calle leo y oigo todo tipo de opiniones. Unos, que deberían salir las cofradías porque los feligreses lo esperan. Otros opinan lo contrario, que los directivos en situaciones como éstas, donde hay un riesgo elevado de lluvia, no pueden poner en juego esos enseres que son de todos los malagueños. Un grupo de desconocidos, que lo eran hasta minutos antes, comienzan una acalorada conversación sobre la previsión de las cofradías ante las amenazas meteorológicas. Unos abogan por sitios donde resguardarse, otros por itinerarios alternativos. «¿Si saben que a las 2.00 de la madrugada va a llover, por qué no adelantan las salidas?», leo en internet.

Facebook.

Me percato de que en el Facebook muchos de los malagueños han cambiado sus fotos de perfil por el de uno de sus titulares favoritos. Es más, veo que hay enlaces directos al pregón de Antonio Banderas, también está en Pdf y me lo descargo mientras las cofradías de Estudiantes y Cautivo, las dos que quedan por decidir su salida, toman su decisión. Bajo Palio, Semana Santa en Málaga TV, La Pasión de Málaga, Ser Cofrade… Internet echa fuego. Sin duda se convierte en una herramienta muy útil no solo para la información sino para la opinión, para sacar conclusiones y opiniones. En Twitter, Ignacio Castillo, hermano del Cautivo y periodista de La Opinión de Málaga, desde la casa hermandad de Cautivo escribe: «Permanente del Cautivo reunida. No se sabe aún si sale o no». Interpreto que ese comentario es muy relevante viniendo de quien viene. No digo nada entre aquel grupo de gente que espera la resolución con poca paciencia.

Conocemos que Estudiantes sale a la calle y que modificará su recorrido temiéndole a la esperada lluvia. A todos esta noticia que acabamos de conocer nos da esperanza para que una de las tardes más importantes de la Semana Santa de Málaga se enmiende y salga Cautivo. Ya puedo ver en www.laopiniondemalaga.es una imagen de Nuestro Padre Jesús de la Columna envuelto en un plástico, minutos después de que el fotógrafo pulsase el botón de su cámara. Increíble.

Un segundo, dos, tres, vuelvo a ver a aquella mujer que llegó de sus estudios en Gran Bretaña llorar angustiosamente, se quita con rabia el auricular de su móvil de su oreja. Resolví enseguida, ahora sin consultar ningún aparatejo, que Cautivo no saldría este año. Así era, los cientos de personas que iban enganchadas a alguna radio a través de su móvil, Mp3, Mp4, IPhone… lo habían oído. Y como si el capitán de un escuadrón militar dijese «a dispersión», comienzan a moverse las cientos de personas que ocupaban la calle Mármoles: «Vamos a la casa hermandad». Yo, perplejo ante aquella imagen; la noticia corrió como la pólvora. Veo como pliegan delante de mí las sillas y todos peregrinan hacia el Cautivo. Al instante, Twitter, y leo a Miguel Ferrary, escribir palabras de ánimo hacia Ignacio Castillo, ambos periodistas de este diario y responsables de los especiales de Semana Santa de La Opinión de Málaga.

No me había movido de aquel sitio, de la calle Mármoles y las nuevas tecnologías me habían contado mil cosas: Situación por GPS de las cofradías que estaban en la calle, opinión en Facebook, Twitter, blogs, webs, televisiones que emiten en directo, radios online, diarios…

Me animé y escribí: «Ánimo a todos los hermanos de Cautivo y Dolores del Puente. Os garantizo que la gente está con vosotros desde cualquier lugar del mundo llueva o no».

Durante un rato sólo leo palabras de aliento desde cualquier punto de la provincia y desde la misma capital. Silencio. Los corazones rotos, callan para hablar con sus titulares. Un momento íntimo y especial. Casi las 3 de la madrugada, Ignacio Castillo escribe: «Ha sido duro pero esto nos hará más fuertes. Tenemos otro año entero para estar con el Cautivo y la Trinidad». Resignación.