Iglesia

Los obispos del sur destacan la fuerza evangelizadora de la religiosidad popular

Publican una carta pastoral 'María, Estrella de la Evangelización' con motivo del 30 aniversario del viaje apostólico de San Juan Pablo II a Andalucía en la que muestran su preocupación por que el secularismo pueda afectar a las expresiones de piedad tan genuinas de las hermandades y cofradías y ofrecen orientaciones para para que no pierdan su verdadero valor

El obispo de Málaga interviene durante el acto penitencial de la cofradía de Estudiantes este Lunes Santo.

El obispo de Málaga interviene durante el acto penitencial de la cofradía de Estudiantes este Lunes Santo. / Eduardo Nieto

Ignacio A. Castillo

Ignacio A. Castillo

Los obispos del Sur de España han publicado una carta pastoral bajo el título 'María, Estrella de la Evangelización' en la que ponen de manifiesta la fuerza y vigencia que los actos de religiosidad popular, tan geuninos en las hermandades y cofradías andaluzas, mantienen como medio para anunciar el Evangelio en la sociedad. La han firmado con fecha 14 de junio, coincidiendo con el 30 aniversario del cuarto viaje apostólico que San Juan Pablo II realizó a España, en 1993, y en el que visitó las diócesis de Sevilla y de Huelva, con su inolvidable visita al Santuario de la Virgen del Rocío, entre otros.

Los obispos destacan la importancia de la piedad popular pero, del mismo modo, muestran su preocupación por que el "secularimos y la descristianización" de la sociedad pueda pasar factura a este fenómeno. Por ello, con este documento pretenden igualmente ofrecer orientaciones para que estas expresiones no pierdan su valor y "favorecer su purificación". "Esta devoción mariana, tan arraigada en esta tierra de María Santísima, necesita ser esclarecida y alimentada continuamente con la escucha y la meditación de la palabra de Dios", señala el documento.

La carta pastoral incluye un total de 60 puntos. Entre los firmantes se encuentra el obispo de Málaga, Jesús Catalá, junto con los arzobispos de las diócesis de Sevilla (y sus dos obispos auxiliares) y Granada y los obipos de Córdoba, Cádiz, Huelva, Asidonia-Jerez, Guadix, Jaén y Almería. Se titula 'María, Estrella de la Evangelización' porque así se refirió el Santo Padre a la Virgen durante su visita a estos importantes centros de peregrinación mariana andaluces.

Empiezan los obispos presentando cómo la piedad popular se integra en la vida del cristiano, "que cree, celebra, se compromete y ora desde la fe en Jesucristo y en comunión con la Iglesia". "La piedad popular, cuando es genuina, tiene como fuente la fe, vivida con autenticidad y coherencia: carece de sentido profesar con los labios el Credo y vivir de manera contraría a la fe y moral de la Iglesia", explican.

También recuerdan la importancia de la Liturgia, como la cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia. Así, insisten en dar preeminencia a la participación en la Misa los domingos, al sacramento de la penitencia, a la oración litúrgica y al año litúrgico sobre cualquier manifestación devocional. Igualmente, es importante, dicen, que las prácticas devocionales no alteren las celebraciones litúrgicas.

Recuerdan los obispos en su carta que el compromisonacido de la caridad es constitutivo de la vida cristianay que la promoción de la justicia, la preocupación por los más necesitados o la defensa de la dignidad humana no son tareas opcionales para el seguidor de Jesucristo. Así, "una vida de fe que no se traduzca en obras concretas de caridad no es auténtica". También la oración es constitutiva del cristiano y, por tanto, lo ha de ser en la piedad popular, que nace de la oración y conduce a ella. Por ello, señalan que las hermandades están llamadas a ser "talleres de santidad".

Jesús Catalá, obipo de Málaga, junto al Papa Francisco en la última visita ad limina celebrada en enero de 2022.

Jesús Catalá, obipo de Málaga, junto al Papa Francisco en la última visita ad limina celebrada en enero de 2022. / Vatican News

Estar cerca de las hermandades

En la segunda parte de su carta pastoral, los obispos recuerdan cómo en la última visita ad limina de los obispos españoles celebrada en enero de 2022, durante el encuentro con los obispos de Andalucía, Extremadura, Murcia e Islas Canarias, el Papa Francisco les pidió expresamente estar cerca de las hermandades y cofradías, reconociendo su aportación importantísima a la piedad popular. Atendiendo a esa llamada, los obispos recorrenlos rasgos de la identidad católica de las hermandades y su contribución específica a la evangelización.

Sobre la identidad católica de estas instituciones, recuerdan cómo, aunque nacieron en el siglo XI, "hoy siguen manteniendo sus mismos fines, que son formación, culto y acción caritativa". Sin embargo, la llamada de los últimos Papas a impulsar una nueva etapa evangelizadora hace ver la necesidad de añadir un cuarto fin: la participación activa en la misión evangelizadora de la Iglesia.

Y sobre esta tarea, recuerdan que, si la Iglesia existe para evangelizar, "las hermandades que sean auténticamente eclesiales existirán también para evangelizar". "La primera preocupación de una junta de gobierno no ha de ser tanto el cuidado del patrimonio material cuanto llevar el Evangelio a todos sus miembros", dicen los obispos en su carta.

Portadoras de esperanza

Así, las hermandades pueden contribuir decisivamente a la tarea evangelizadora si contribuyen a la transmisión de la fe, se comprometen en la práctica de las obras de misericordia y son portadoras de esperanza para el mundo, a través de la devoción a sus sagrados titulares y por el camino de la belleza de las procesiones, "que han de cuidarse para que sean auténticas manifestaciones de fe".