Defensa de los animales
Medio centenar de activistas se desnudan en Madrid contra el uso de pieles para abrigo
EFE
Unos 50 activistas de AnimaNaturalis se han desnudado este domingo en Madrid para denunciar la obtención de pieles para abrigos y pedir el cierre de las granjas peleteras por “vulnerar” los derechos de los animales que proveen estos materiales.
Delante de unos conocidos grandes almacenes en la calle de Preciados, los activistas, rociados con sangre simulada, se han amontonado unos encima de otros como “recién despellejados” para ejemplificar las condiciones de vida de los animales a los que se les extrae la piel “en vida” para fabricar este tipo de prendas de vestir.
La acción busca visibilizar las condiciones de “frío y calor extremo” en las que viven estos animales, dice a Efe Jaime Posada, portavoz de AnimaNaturalis, que también ha afirmado que residen en “jaulas” para “intentar no dañar sus pieles”.
Posada asegura que, a los seis meses, a estos animales “se les arranca la piel en vida” y, durante ese proceso, se utilizan métodos como la “electrocución anal” o la “cámara de gas” para adormecerlos, por lo que siguen despiertos mientras se les despelleja.
“En la actualidad es absurdo seguir utilizando pieles animales para los abrigos cuando hay pieles sintéticas con las que no tienes que mantener a un animal sufriendo de por vida”, argumenta.
- Aviso urgente de Hacienda sobre la declaración de la Renta: este es el SMS que está llegando a los contribuyentes
- Málaga será la única provincia del sur peninsular con autopistas de peaje
- Sale a subasta la Hacienda San Javier, la finca malagueña del siglo XIX
- Aviso de Gonzalo Bernardos sobre el recorte de las pensiones: ""Se aumentan los ingresos para que los jubilados...
- Buscan a los detenidos por un tiroteo en Marbella, puestos en libertad en Málaga
- La ejecutiva del PSOE de Vélez-Málaga salta por los aires: 19 dimisiones fuerzan la caída de Moreno Ferrer
- Los coches con etiqueta B y C dejarán de circular: ya hay fecha oficial
- La Junta autoriza una gasolinera proyectada desde hace una década en el Camino de San Antón