El Hospital General de Valencia se suma a la obligatoriedad de las mascarillas

La obligatoriedad del uso de la mascarilla se ha impuesto desde el viernes en algunos espacios del Hospital General de Valencia. El centro es el segundo centro hospitalario de la ciudad en adoptar esta medida -lo hizo el Peset el pasado martes en Urgencias y oncología- ante el repunte de casos de nuevos contagios de la Covid-19. Así lo decretó el viernes la dirección del hospital, quien informó a todos los departamentos con una circular el pasado viernes, como ha confirmado a Levante-EMV, de Prensa Ibérica, la jefa del servicio de urgencias, Neus Valls, en la mañana de hoy.

Las zonas de uso obligatorio del tapabocas son los servicios de Urgencias, la zona de hospitalización, la UCI y las salas de espera colindantes; al considerarse que son los espacios "más sensibles" para nuevos contagios. Además, el centro recomienda también su uso en la zona de consultas externas aunque, por el momento, la obligatoriedad no se ha impuesto en estos espacios.

La medida está afectando a los pacientes que visitan estos servicios del hospital, aunque "se está llevando con total normalidad", explica Valls. De hecho, la jefa de Urgencias reconoce que, a pesar de que su uso dejó de ser obligatorio el pasado 5 de julio, aún "había muchos pacientes que preferían seguir usándolo". La decisión del centro es temporal, aunque no se ha estipulado ningún terminio concreto, así que estará vigente hasta que la dirección lo considere oportuno según la evolución de los datos de nuevos contagios.

El pasado martes, fuentes de la Conselleria de Sanidad informaron de que la medida no se iba a adoptar de manera generalizada en los hospitales valencianos, aunque habrá que estar atentos a la evolución de los contagios y la valoración que la conselleria haga al respecto.

Una posibilidad vigente en la ley

El uso de mascarillas en hospitales y centros de salud (y también en farmacias) dejó de ser obligatorio en toda España el pasado 5 de julio al tiempo que se decretaba el fin de la crisis sanitaria por el coronavirus pero, aún así, la ley sí deja la posibilidad de volver a pedir su uso en zonas vulnerables cuando así lo requieran desde Medicina Preventiva teniendo en cuenta el nivel de riesgo y evitar que los hospitales se conviertan en focos de contagio y propagación del virus.