«Era un niño muy querido en el club. Siempre se mostraba muy risueño y era de los que se hacía querer», manifestaba el presidente del Malaka, José Antonio Benítez. «Es de esas noticias que no te crees. De hecho, hasta el mediodía de este domingo llegamos a creer que se trataba de un rumor».

De inmediato, justo a esa hora se suspendieron todos los encuentros con presencia de algún equipo de la entidad de la barriada malagueña de Carranque. No tardaron en sucederse las muestras de cariño y los mensajes de condolencia desde todos los rincones de la provincia. «El fútbol base malagueño está consternado», insistió otro directivo a este periódico.

«Cuesta pensar que una arritmia, que es lo que le han comunicado a los padres sobre las causas de la muerte, acabe con un niño de 17 años», relataba uno de los técnicos del club. Aún está reciente la imagen del fallecido en la gran recogida de alimentos de Bancosol, en la que participó como voluntario como otros alumnos del CEIP Miraflores de los Ángeles.