El Palo, su barrio de pescadores pero sobre todo su humilde club, siempre han tenido el duende futbolístico recorriendo sus calles, de acera a acera, o forjándose con carisma en el jardín de las ilusiones que siempre ha sido San Ignacio. Una fábrica de talento que ha sido tan fructífera como para dar suministro incansable incluso al propio Málaga CF o para repartir calidad por la Primera División. Pero sobre todo, además de humildes, han sido orgullosos de ser paleños, lo que sin duda ha sido una tremenda virtud.

Ahora, El CD El Palo vuelve a presumir y a destacar en el Grupo IX de Tercera División, en su hábitat histórico. Y lo hace recuperando su mística, su magia y su duende. Ése que convierte al ya mítico San Ignacio en un fortín y que también lo transforma en un equipo aguerrido cuando juega de visitante. La mezcla, a día de hoy tras 13 jornadas disputadas, es perfecta; y los resultados, indiscutibles.

Y es que los paleños lideran la clasificación en solitario, por encima de clubes como el Real Jaén -segundo-, Antequera -cuarto- o el Loja, quinto y próximo rival. Un orgullo que esconde algunos secretos, casi idénticos a los que le llevaron hace unas temporadas a reinar en la categoría e incluso a ascender a Segunda B con dos años para el recuerdo.

Aquel curso que aún perdura en la memoria, el de la temporada 2012/13, el de El Palo de Guede y Daniel Pérez, de Fendi o de Gerrit, entre otros muchos, acabó la temporada primero. Y en la fase de ascenso se merendó al Burgos, al Jumilla y al Fabril, en un partido para el recuerdo que los llevó a Segunda B. Ahí estuvo dos años históricos que colocaron al equipo paleño en el mapa, pese a que toda la vida ha sido un club humilde que ha sido feliz formando jugadores.

Del último ascenso continúan Jesús Moro, que ya estaba en el cuerpo técnico entonces, y los jugadores Nacho Aranda, Durán y Javilillo. Aunque de la época dorada en Segunda B continúan algunos más.

Sin embargo, ahora es El Palo del técnico Funes, de Juanillo, que ya es un veterano, o de Reina, el guardameta y ‘Zamora’ de la categoría. Un equipo donde tienen cabida nombres ya ilustres de la entidad que han hecho más cómoda la adaptación de los Kike Linares, Cazorla Medina o el veterano Jorge Pina, que llegó a jugar con el Málaga CF en Primera. Ahora, con esa mezcla de caminos, avanza con paso firme en una categoría donde los sobresaltos están a la orden del día. Y sólo el Huétor Tájar, precisamente en el coso paleño, ha sido capaz de doblegarlos (jornada 3, 1-2) tras 13 jornadas disputadas. De hecho, no ha encajado ningún gol aún lejos de casa, lo que ensalza su poderío defensivo y su capacidad competitiva.

Las bases, desde el verano

Buena culpa del éxito de este inicio de Liga, además de Funes y la plantilla, es de Juanchu Lumbreras. El director deportivo malagueño asegura sentirse contento y satisfecho, aunque no sorprendido por cómo se están desarrollando los acontecimientos. «Estamos muy contentos y deseando que siga esta racha positiva para cumplir el objetivo del curso, que es el de meternos en el play off. Cuando confeccionamos la plantilla sí sabíamos que era un equipo competitivo para luchar por colarnos entre los primeros», afirma.

Una de las claves es la cercanía del equipo que siempre ha tenido con su afición. «El cariño de la gente lo estamos notando, nos llegan muchos mensajes con felicitaciones y apoyo. Desde aquí hacemos un llamamiento a la gente para que llene el campo. Es necesario. Supongo que esa ilusión que tenemos se irá transmitiendo con el paso de las jornadas. La gente está muy ilusionada. Por eso, a ver si se llena el campo. No hemos perdido aún ningún partido a domicilio. Ni hemos encajado un gol siquiera lejos de casa», destaca el malagueño.

Juanchu, sin embargo, no quiere hablar de ascenso por el momento. «Es precipitado hablar del ascenso aún. El año que ascendimos a estar alturas estábamos en mitad de tabla y a muchos puntos del líder. Aún es pronto», afirma a la vez que destaca el complejo mes de noviembre que tienen por delante.

El primer examen es este domingo (18.00 horas), en San Ignacio contra el quinto clasificado, el Loja CD. Precisamente, el entrenador paleño, Juan Francisco Funes, es nacido en Loja y comenzó su carrera como técnico en el club granadino. Ahora, afincado ya en Málaga como profesor, tiene los cinco sentidos puestos en la victoria de los malagueños.

El siguiente compromiso será en Jaén, contra el actual segundo clasificado. Y cerrarán el mes recibiendo en San Ignacio al Linares, tercero. Si El Palo sale ‘vivo’ de ese ‘Tourmalet’ de partidos, su candidatura al ascenso será más sólida que nunca. Pero mientras, la mística y los sueños se dan cita en San Ignacio.