Samu Casado se convirtió ayer en la auténtica bestia negra para un San Fernando que salía al campo con opciones de asentarse aún más entre los cuatro primeros clasificados. No contaba con que el extraordinario guardameta del filial malaguista detendría dos penaltis, el primero ya con ventaja de los visitantes y el segundo, clave en la resolución del duelo, con tablas a uno.

Iván Jaime hizo saltar la sorpresa para un colista cada vez más correoso y difícil de doblegar. Suya fue la diana que a los 18 rompía la igualdad inicial. Pero seis minutos más tarde y pese a la primera gran intervención de Samu consiguió empatar el cuadro isleño por medio de Pablo Sánchez.

Los visitantes no se arrugaron en ningún momento. Abonados a la enorme actuación de su portero salieron airosos de una segunda pena máxima en contra y se fueron a por los tres puntos para iniciar la segunda vuelta con una renovada ilusión por la permanencia. Así llegaría la segunda diana de un Hicham que volvió a ser el de las mejores tardes.

Los pupilos de Manolo Sanlúcar recibirán con esta motivación añadida al Marbella, este próximo domingo, desde las 12.00 horas.