El Marbella FC no pudo prolongar su racha invicta en este arranque liguero y cosechó ante la UD Tamaraceite su primera derrota. El choque sobre el sintético del estadio Juan Guedes, situado en la barriada de la capital grancanaria, se vio condicionado por la expulsión del blanquillo de Alfred Planas (al parecer por insultos a un rival).

Hasta ese minuto 49 el encuentro no tuvo un dominador claro, si bien es cierto que los costasoleños consiguieron adelantarse antes de que el colegiado Tárraga Lajara señalara el descanso. Una gran internada del propio Planas, con centro que remató a placer Juanmi Callejón, enmudeció a unos 200 espectadores que soñaban con una primera victoria de su equipo en la recién estrenada categoría.

Los insulares habían empatado sin goles ante el San Fernando y La Balona, de manera que encajaban así, en el minuto 37, su primer tanto de la temporada. Hasta ese momento sus intentos por sorprender a la zaga visitante habían acabado o en las manos de Santomé o con el esférico fuera del arco.

Pero tras la reanudación y la rápida cartulina roja que vio Planas, el recién ascendido se volcó al ataque dispuesto a darle la vuelta a la diana que reflejaba el tanteo. Apenas cinco minutos después de que el local Pitu entrase en sustitución de Jordan, una acción suya serviría para elevar el empate, tras rechazar Santomé un cabezazo de Eros.

Una pena máxima en el minuto 79, que consiguió transformar Jonathan Quintero (Marcos lo había empujado en el área), culminaba esa remontada para una de las escuadras más modestas de Segunda B y ante otra con un presupuesto diseñado de nuevo para poder acceder a la Liga SmartBank.

Los costasoleños intentaron sin éxito buscar en las postrimerías un gol que al menos sirviese para atar un punto. Sin embargo, en los últimos instantes del tiempo de descuento culminaría el también local Alexis Ramos otra llegada para establecer el definitivo 3-1. Fue un verdadero jarro de agua fría después de que el cuadro marbellí hubiese vencido en su feudo, el fin de semana anterior, con un contundente 5-1, al también canario CD Marino.

Los pupilos de Chus Trujillo demostraron sobre el césped sintético del Juan Guedes que los dos primeros puntos en este arranque liguero no eran fruto de la casualidad. Pese a que el Marbella FC había viajado con todas las precauciones, a los tres minutos ya se encontró una primera ocasión clara, por medio de López Silva, y luego le tomaría el relevo su compañero David González. El encuentro sirvió a los costasoleños de «baño de humildad» casi de principio a fin.