El Unicaja, por lo que no tiene previsto activar ningún tipo de cláusula de corte y el escolta finlandés seguirá en Málaga el próximo curso. El plan que tiene trazado el club de Los Guindos, una vez fichado ya Luis Casimiro y tener un entrenador sobre el que desarrollar este nuevo proyecto, es reducir de cinco a cuatro jugadores el perímetro cajista. Con la continuidad de Sasu Salin asumida por las dos partes, más la continuidad ya pactada con Adam Waczynski, tal y como informó ayer La Opinión, ambos junto a Dani Díez y Dragan Milosavljevic ocuparán el juego exterior verde en el curso 2018/19.

La intención ahora de la dirección deportiva es fichar a un base de primerísimo nivel, muy probablemente de nacionalidad americana, que comparta el timón del equipo con Alberto Díaz. No gustó la experiencia de hace dos años de tener a tres bases, al igual que tampoco ha cuajado buen resultado tener tres aleros, como ocurrió este curso.

De esta forma, bien Waczynski bien Milosavljevic jugarán como escoltas, junto a Salin. Y la idea que existe a día de hoy en el Unicaja es fichar a un «combo», un jugador pequeño capaz de simultanear los puesto de «uno» y «dos». Un jugador de un perfil medio, que acepte su rol de ser tercer base y tercer escolta y que, ante la lesión o bajo rendimiento de cualquier compañero en esas posiciones, se gane más minutos y más protagonismo. Se trata de un jugador que debe entender el juego y ser completo en todas las facetas. Pero para este jugador no se va a dedicar una partida presupuestaria importante.

Queda un importante remanente para fichar a un base muy potente. Hay que recordar que la idea a día de hoy -en Los Guindos siempre hay varios planes y las ideas cambian- es no fichar a un recambio por Nemanja Nedovic. Es decir, que el jugador más desequilibrante de la plantilla no tendrá un sustituto. Ni bueno ni malo, simplemente se hace espacio para que cada jugador con contrato en el perímetro verde goce de más minutos.

Esto significa que sí que habrá una partida muy importante para contratar un base de máximas garantías, un puesto en el que la dirección deportiva y Joan Plaza no han acertado en los últimos años, con jugadores como Oliver Lafayette o Ray McCallum. «Nedo» tenía firmado 1,3 millones (brutos) y su salida al Olimpia Milán por dos años dejará un mínimo de 350.000 euros. Claro que también habrá una disminución en la partida presupuestaria que aportan Unicaja Banco y Fundación Unicaja, y está por ver qué ocurre con la masa social verde. Este curso se recuperaron registros de hace muchos años, pero la campaña de abonos para 2018/19 aún ni se ha presentado. Y eso, tres semanas y media después de haber acabado ya de competir.

Así las cosas, a los cuatro exteriores ya fichados (Salin, Waczynski, Milosavljevic y Díez) más al base de máximo nivel y Alberto Díaz, se sumará un «combo», que pueda simultanear los puestos de base y escolta, de perfil medio, y que pueda cubrir bajas por lesión o bajo rendimiento.