Ya estoy en la cama. Hoy mis padres no han tenido que mandarme a dormir. Me vine yo sola. Y es que mañana juego mi primer partido de baloncesto. Sí. Este curso me apunté a un equipo que hay en mi colegio. Tengo nueve años y mañana juego con mis compañeras del cole contra otro cole supongo, porque la verdad es que mi profe no nos ha dicho contra quién jugamos. Tengo que estar en el pabellón a las nueve de la mañana. Por eso me fui a mi habitación pronto porque mañana no me quiero quedar dormida y llegar tarde. Pero, ¿sabes qué pasa? Que no me puedo quedar dormida. Tengo algo en el estómago, como unas hormiguitas que no paran de andar ahí dentro que no dejan que me duerma. Por eso llevo aquí un buen rato dando vueltas.

Llevamos casi dos meses entrenando. Debemos de ser muy buenas porque nuestro profe no para de repetirnos lo bien que lo hacemos. Y mira que fallamos canastas... También regaña cuando hablamos en el entreno o nos despistamos. Nos ha dicho que mañana al partido viene un árbitro y que nos quitará puntos si hablamos. Yo no sé si eso será verdad porque un día vi un partido por la tele y los jugadores hablaban y no le quitaban puntos por eso. Pero bueno, nosotras le vamos a hacer caso al profe.

Todavía el profe no nos ha dado la equipación. Todos los días le preguntamos cuándo vienen. Nuestro profe nos ha prometido que mañana nos trae unas camisetas provisionales y que nos podremos quedar con ellas para entrenar cuando lleguen las nuevas equipaciones.

Espero que el profe me elija para sacar. Es lo que más nos gusta a todas. También elije a dos para que corten a recibir y dos que corran. Pero todas le pedimos que nos elija para sacar. A ver si tengo suerte y me escoge a mí. Yo se lo voy a pedir lo que pasa es que mis amigas también se lo piden y es un poco lío cuando todas se lo pedimos a la vez.

Ya estamos en el partido. Es verdad que ha venido un árbitro. Va vestido como los que salían en la tele en ese partido que vi con mi padre. ¿Será verdad que nos va a quitar puntos por hablar? Las niñas del otro equipo son más altas. El profe ha dicho que nosotras luchemos sin descanso y que no tengamos miedo por tirarnos al suelo a pelear por la pelota. También nos ha dicho que cuando tengamos el balón nos pasemos, que lo compartamos. Dice que cuando nos toque estar en el banquillo, no paremos de animar pero que estemos sentadas. Solo podemos levantarnos para celebrar cuando metamos una canasta. Nosotras vamos a cantar una canción que nos sabemos para animar a las que estén jugando.

Ya terminó el partido. Al principio estaba muy nerviosa. No quería que el profe me eligiera para salir. Pero poco a poco se me quitaron las hormiguitas del estómago y ahora quería que el profe me eligiera para jugar todos los sextos. Las niñas del otro equipo metieron más canastas. Pero el profe no nos regañó nada nada. Y nuestros padres estaban muy contentos. No entiendo por qué si las otras niñas metieron más puntos. Nadie nos dice si hemos ganado o hemos perdido. No sé, será que eso no es importante. Todo el mundo nos felicita. El profe, mis padres, los padres de mis compañeras. Eso es que hemos jugado muy bien así que todas estamos muy contentas. Nuestros padres nos han hecho muchas fotos cuando ha acabado el partido así todas juntas como si fuéramos un equipo. Bueno, es que somos un equipo.

Pues me lo he pasado muy bien en mi primer partido. Nos falta una mascota. El profe nos ha dicho que va a ser una rana porque la seño Mirari usa un cd que habla de una rana para relajarnos en clase de educación física. Tenemos que pensar entre todas el nombre que le vamos a poner y la vestiremos con una camiseta que nos ha sobrado de las que nos trajo el profe.

Yo me llamo Lola, Lucía, Beby, Paula, Marina, Olivia, Patricia, Amapola, Diana, Jade y Adriana. Y jugamos en el equipo de baloncesto del colegio Las Chapas de Marbella. ¡Ah! Nuestro profe se llama Francis y nos cae muy bien. ¿Y sabéis que os digo? Que ya tengo ganas de jugar otro partido.