Entre los más de 500 aficionados que se desplazaron desde Málaga a Madrid para apoyar al Unicaja había uno muy especial. Bernardo Rodríguez, junto a su pareja, se montó en el AVE de las 10.55 horas de la Estación María Zambrano de Málaga para estar presente en el torneo copero. El excapitán cajista quería vivir de cerca el torneo del k.o. Y lo hizo. Llegó a Madrid a las 13.40 horas y después del almuerzo llegó al Wizink Center.

El "5" presenció en primera fila, detrás del banquillo malagueño, el encuentro entre Unicaja e Iberostar Tenerife, aunque no pudo ser talismán. El "capi" estuvo charlando con aficionados y jugadores, entre ellos, Alberto Díaz. El base malagueño no pudo ayudar al equipo debido a su lesión, así que charlaron animadamente antes del choque.