El Unicaja regresó ayer lunes a los entrenamientos tras haber tenido el fin de semana libre, ya que los malagueños no han competido en la Liga Endesa, pues su visita a La Fuente de San Luis de Valencia fue aplazada por la disputa de la gran final de la Eurocup.

La única baja que tiene Luis Casimiro Palomo es la de Carlos Suárez. El capitán se lesionó a finales de la pasada semana al sufrir una microrrotura en el bíceps femoral de la pierna derecha. El «capi» va a estar 10 días parado y se espera que a finales de esta semana vuelva a ser examinado, estando prácticamente descartado que pueda jugar ante el Breogán en Lugo el próximo domingo 21 de abril a partir de las 19.30 horas.

El trabajo con Suárez va a estar más bien planificado para que pueda volver el miércoles siguiente, cuando el Unicaja recupere el encuentro de Valencia que no disputó este pasado fin de semana. El ala-pívot madrileño ha estado esta temporada dos meses en el dique seco por una lesión muscular en el gemelo y hay que mimarlo para que su físico no se resiente y siga ayudando al equipo cajista.

Quien sí que se ha recuperado ya es Brian Roberts. El base ha podido regresar al trabajo con el grupo, aunque todavía con molestias en su mano derecha, en la que sufrió una lesión en el quinto dedo. Tras una semana de descanso, Roberts podrá medirse al Breogán.