La pretemporada cajista sigue su marcha después de que el equipo haya tenido sus dos primeros partidos amistosos frente al Zenit de San Petersburgo de Joan Plaza y el Real Madrid, saldados ambos con derrota 69-76, en el Trofeo Costa del Sol. La doble cita de Torrox y Nerja ha servido para ver en acción por primera vez a cuatro de los siete fichajes realizados por el Unicaja este verano. Mientras Melvin Ejim (Canadá), Axel Toupane (Francia) y Deon Thompson (Costa de Marfil) siguen su periplo, con suerte dispar, en la Copa del Mundo de China, los demás recién llegados en este mercado estival -Josh Adams, Aleksa Avramovic, Volodymyr Gerun y Frank Elegar-, sí se han puesto ya la nueva camiseta verde cajista.

Es evidente que los primeros 80 minutos de juego suponen todavía muy poco tiempo para poder emitir un juicio profundo de qué puede aportar cada uno de los nuevos en este proyecto del Unicaja 2019/2020. El pasado reciente así lo atestigua. Y es que en el recuerdo está la espectacular pretemporada que firmó hace un par de veranos Ray McCallum, que se exhibió en casi todos los partidos de preparación, que dejó boquiabierta a la afición, que fue catalogado por los expertos como el "mejor fichaje" llegado a la ACB ese verano de 2017, pero que al llegar la Liga Endesa y la Euroliga se convirtió en un jugador gris, alocado, individualista e intermitente, que no cumplió ninguna de las expectativas que dejó entrever en sus primeros meses en Málaga.

Los duelos contra Zenit y Real Madrid dan, al menos, para un primer análisis. Para poder prever qué puede aportar cada uno de los recién llegados a un Unicaja que esta temporada ha apostado por tener más músculo y ser más atlético que el del curso pasado, pero que también muestra menos talento ofensivo y acierto en el tiro exterior. Es verdad que faltan Waczynski, Topupane, Ejim y Thompson, pero que este Unicaja va a defender más y a anotar menos que el del año pasado creo que es una afirmación que sí se puede hacer sin demasiado riesgo a que la hemeroteca nos pueda sacar los colores el próximo mes de junio, cuando el curso 2019/2020 eche el cierre.

Vayamos uno a uno con los nuevos. Josh Adams ha hecho mejores números que las sensaciones que ha mostrado en este inicio de pretemporada. Tiene muchos puntos en sus manos, es verdad, y una capacidad atlética y potencia de salto descomunal. Dará mucho espectáculo con sus vuelos sin motor, pero lo cierto es que el Unicaja no es el Circo del Sol y no se le ha fichado para dar saltos ni para pegar mates. La idea es que sea el presunto base titular y ahí es donde precisamente ha dejado más dudas. No parece ser el director de juego que se buscaba en el mercado estival. Está recién llegado y tiene que adaptarse al rol para el que ha sido fichado, pero lo que se ha visto en los dos primeros partidos es que no es un base puro. Y eso es muy preocupante si nos atenemos a los últimos precedentes. Ofensivamente ha cumplido con 27 puntos entre los dos partidos (10 y 17), pero después de 24 tiros a canasta. Un dato preocupante: solo 2 asistencias (1 y 1).

Aleksa Avramovic

ha demostrado que es un killer. Un jugador que siempre busca la canasta rival. Ha sido, empatado con Adams, el máximo anotador de estos dos primeros partidos de preparación, con 27 puntos (7 y 20), pero asumiendo una cantidad de tiros (30) que no podrá hacer durante la temporada, cuando esté el equipo al completo. Por momentos recuerda a su compatriota Nemanja Nedovic en su forma de jugar e incluso en su look, con mallas bajo los pantalones, aunque estemos en pleno verano y haya 33 grados en la calle. Se mostró, sobre todo contra el Real Madrid, algo individualista. Tiene que tranquilizarse, asumir su rol y tratar de evitar hacer la guerra por su cuenta. Le va a costar el paso de la poco competitiva LEGA a la poderosa Liga Endesa. No obstante, su puesta en escena ha sido, por lo menos, interesante.

Volodymyr Gerun

ha mostrado una buena cara en estos dos partidos. Hizo 8 puntos y 2 rebotes contra los rusos y 6 puntos y 6 rebotes, ante el Real Madrid, en 16 minutos de media por partido. Se le ha fichado como jugador de rotación interior y ha cumplido con esa premisa en el Torneo Costa del Sol. Está claro que no será un jugador con un rol de excesivo protagonismo esta temporada (salvo sorpresa), pero parece que puede ser una muy buena ayuda en la rotación de los hombres interiores.

Frank Elegar

ha sido el que ha firmado unos números más pobres en esta doble primera ración de partidos amistosos (2 puntos y 2 rebotes frente al Zenit, y 6 puntos y 2 rebotes contra el Madrid). Es verdad que no ha brillado, pero es que el equipo no ha jugado para él. Elegar es un jugador de bloqueo y continuación. Necesita que el base le meta el balón dentro para producir. Y eso ha sido a cuentagotas. Elegar no es un jugador de fabricarse la canasta, de que le den la pelota a seis metros y se vaya para adentro. Si el equipo no le va a buscar, su fichaje será un fracaso. Pero si los compañeros le meten balones, aprovechará su espectacular humanidad para meter muchas canastas y/o sacar muchas faltas.

En definitiva, el Trofeo Costa del Sol ya es historia. A partir del viernes, segunda cita de la pretemporada con el Torneo Ciudad de Getafe. Esperan el Movistar Estudiantes, el viernes, y el Herbalife Gran Canaria, el sábado.