Con la llegada de la Copa del Rey, momento clave para la temporada de Unicaja, todas las miradas están puestas en la plantilla, especialmente en los jugadores que estarán disponibles para disputarla.

Desde que empezó la campaña, el conjunto cajista ha sufrido una serie de lesiones que no le han permitido disponer del equipo al completo. De hecho, de los 36 partidos disputados hasta el momento, contando con Liga Endesa y Eurocup, Liga EndesaCasimiro.

Como si de un milagro se tratase, el entrenador cajista podrá volver a reunir a sus 12 jugadores para la Copa del Rey, algo que no ocurre desde el 11 de enero en el choque contra el UCAM Murcia en Liga Endesa. Ocho partidos consecutivos con, al menos, un lesionado.

Ya desde el tercer partido que disputó el conjunto de Los Guindos esta temporada, la enfermería comenzó a recibir visitas. Axel Toupane,Jaime Fernández, Alberto Díaz, Frank Elegar, Melvin Ejim y por último Darío Birzuela, se han perdido algún partido por lesión. El jugador que más partidos ha estado apartado de las pistas ha sido Ejim, que de los últimos 10 solo ha jugado dos. En total, ha estado en el banquillo en 11 de 36 encuentros.

Haciendo especial hincapié en los números, de los 21 partidos en los que Casimiro ha recurrido a algún canterano para completar la plantilla, el Unicaja ha ganado en 12 ocasiones. Un dato positivo, ya que significa que los jugadores son capaces de sobreponerse y sacar al equipo adelante cuando falta un compañero. Así ha ocurrido en estas últimas semanas, decisivas para el futuro de los malagueños en la competición europea, en la que Ejim, Elegar y Brizuela no podían jugar.

Por otro lado, de los 14 encuentros en los que Casimiro sí que ha contado con todos sus efectivos, se han conseguido seis victorias y ocho derrotas. Puede sonar extraño que cuando están todos los jugadores se pierdan más partidos que los que se ganan, pero no hay que alarmarse ya que, salvo las dos últimas ante Monbus Obradoiro y Tofas Bursa, el resto de derrotas se produjeron en los dos primeros meses de competiciones cuando a la plantilla le faltaba aún rodaje.

El equipo ha ido evolucionando a lo largo de las semanas. Sabe reaccionar ante las adversidades que lleguen, independientemente de los altibajos a los que ya tiene acostumbrada a la afición cajista.

Además, las lesiones han permitido que otros jugadores destaquen y consigan minutos y protagonismo. Este es el caso de Rubén Guerrero o Adam Wazcynski, ambos de gran relevancia en los últimos triunfos de Unicaja.

Independientemente de las cifras y las estadísticas, Casimiro espera unir a toda la plantilla para tratar de acabar con la maldición del anfitrión y hacer que la Copa del Rey se quede en Málaga.