Cambio de planes en Los Guindos. Después de varias semanas buscando un jugador exterior para actuar como «temporero» hasta diciembre, mientras se recuperan de sus respectivas lesiones Jaime Fernández y Dragan Milosavljevic, el club cajista parece que ha decidido apostar por lo que ya tiene en casa de forma definitiva y no rastrea ya el mercado. Así lo desveló el pasado viernes Luis Casimiro, en su primera rueda de prensa de la pretemporada. «En principio no vamos a fichar a nadie. Tenemos plena confianza en la confección de equipo que hemos hecho. Estamos esperando que se recuperen los lesionados y esta pretemporada nos va a servir para que los jugadores que están en el equipo puedan expresarse y hacer su trabajo y también para hacer un test para saber si necesitamos algo más. Creo que el equipo está equilibrado y tenemos suficientes piezas para afrontar el inicio de la temporada», dijo el técnico manchego.

La decisión de dar por cerrada la plantilla supone una apuesta directa por el canterano Francis Alonso pero que en estas circunstancias, mientras Jaime y «Gagi» regresan a las pistas, se convertirá en uno más en la rotación de un primer equipo en el que en los próximos tres o cuatro meses tendrá la oportunidad de ganarse minutos de calidad y un rol importante en la rotación.

La verdad es que los rectores del Unicaja, desde que Francis regresara el pasado mes de marzo de su doble cesión al Fuenlabrada y al Oviedo de la LEB Oro, siempre han avalado en sus declaraciones públicas la presencia en el primer equipo del base-escolta costasoleño. Pero los hechos, sin embargo, no han sido siempre acordes a esas palabras. Porque mientras el club verde es verdad que descartó una propuesta de cesión del jugador al campeón de Polonia entrenado por Zan Tabak, al mismo tiempo se lanzó al mercado a buscar un «temporero» que jugara en su misma posición y que pudiera venir tres o cuatro meses a ayudar al equipo mientras los lesionados recuperaban su forma. O sea, que la apuesta por Francis era de sí... pero no.

Ahora, la situación es distinta. Según palabras de Casimiro, la temporada empezará con los 11 jugadores sanos de la primera plantilla (Francis incluido), sin el escolta madrileño y al alero serbio. Sea porque el mercado no ofrece ningún jugador de garantías o porque el «combo» malagueño ha terminado de convencer al staff técnico en los entrenamientos, lo cierto es que Francis está ante su gran oportunidad de reivindicar su calidad como jugador del primer plantel verde.

Hay que recordar que el malagueño se formó en la cantera cajista antes de marcharse a estudiar y jugar a Estados Unidos en la NCAA, con la Universidad de Greensboro, con la que promedió más de 15 puntos en cuatro temporadas y más de un 40% en triples.

El pasado verano, una vez concluida su etapa universitaria, firmó por el Unicaja por tres temporadas. Al principio de la pasada campaña 2019/2020 fue cedido al Montakit Fuenlabrada, donde tuvo escasas opciones debido a una lesión y a la poca confianza que le mostró Jota Cuspinera. Buscando minutos recaló después en el Liberbank Oviedo de la LEB Oro, con el que disputó hasta la suspensión de la Liga por culpa de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus tres partidos, promediando 21 puntos, 2,3 rebotes y 3 asistencias en 26 mins.

Cajista tras el confinamiento

Una vez pasado el confinamiento, se incorporó al Unicaja para preparar la Fase Final de la Liga Endesaen los entrenamientos y en plena cuenta atrás para viajar a Valencia, dio positivo por coronavirus y se tuvo que quedar en tierra, cerrando un año horrible que ahora parece que por fin se puede tornar favorable a los intereses del exuniversitario norteamericano.

El presidente, Eduardo García, fue contundente el día de la presentación del acuerdo de renovación de Luis Casimiro a la hora de hablar de Francis Alonso: «Con Francis ya lo hemos demostrado, el director deportivo ha estado impecable en ese sentido. Nada más llegar del coronavirus preguntó dónde está. Vino para acá a entrenar con el equipo y hubiese ido a Valencia si no fuera por las circunstancias. Es de la casa, de la plantilla, está en el róster. Lo sabe más que de sobra que apostamos por él, necesita su tiempo. Vamos a hacer análisis de un jugador, no habéis escrito más de un jugador... Es patrimonio del club, del patrimonio se habla bien»,aseguró.

Ahora parece que por fin ha llegado su momento. Brizuela. Incluso el malagueño podrá ejercer también de base, junto a Díaz y Mekel, en el caso de que sea necesario de manera puntual. Es, por fin, «la hora de Francis».